La Guerra Comercial entre China y Estados Unidos: Un Choque de Paradigmas Económicos
Vivimos en una época de profundos cambios en el orden económico mundial. La era del libre comercio global ha llegado a su fin, y la Organización Mundial de Comercio se ha vuelto cada vez más irrelevante, en gran medida debido a que Estados Unidos ha socavado su capacidad para resolver disputas y hacer cumplir sus reglas. Este cambio de paradigma se debe a una prioridad fundamental: la seguridad nacional.
El Nuevo Paradigma: Autosuficiencia Estratégica
Mientras que antes lo que importaba era abaratar costos para beneficiar a los consumidores en un mercado global, ahora lo relevante es propender a la autosuficiencia estratégica. Es decir, no quedar a merced de los envíos del resto del mundo o, al menos, disminuir esa dependencia, asegurando una capacidad productiva de cierto nivel. Este nuevo paradigma requiere de cierto nivel de proteccionismo e intervención estatal, lo que se manifiesta en medidas arancelarias, subsidios, control de exportaciones y filtro de la inversión extranjera.
El Impacto en China y Estados Unidos
Uno de los países que más tiene que perder en esta transformación es China. Su economía está fundamentada en las exportaciones y le es crítico mantener y diversificar el acceso a los mercados internacionales. Por su parte, Estados Unidos está empeñado en recuperar su liderazgo industrial, particularmente en sectores estratégicos como los semiconductores, la electromovilidad y las energías renovables no convencionales. Para lograrlo, está recurriendo a masivos subsidios y alzas arancelarias selectivas.
Las Tensiones y Repercusiones Globales
Estas medidas proteccionistas generan tensiones y represalias económicas entre los países, acelerando la instalación de una nueva arquitectura comercial internacional. Esto también produce desviación de comercio, afectando a unos países más que a otros, y aumentando la influencia de China en América Latina, que podría cobrar mayor relevancia estratégica.
Conclusión: Adaptarse a un Nuevo Orden Económico
En resumen, estamos presenciando una reindustrialización de países que habían mutado hacia una economía de servicios, lo que choca con la lógica tradicional de los mejores precios y genera alzas que perjudican a los consumidores. Los países deberán adaptarse a este nuevo orden económico, buscando formas de conducirse y beneficiarse en la configuración de estos escenarios.
Referencias
Artículo original: China y Estados Unidos: otro capítulo en la guerra comercial