Escándalo en Brasil: Registro en casa y oficina de hijo de Bolsonaro por espionaje ilegal
La Policía Federal de Brasil llevó a cabo un registro en la casa y la oficina de Carlos Bolsonaro, uno de los hijos del expresidente Jair Bolsonaro, como parte de una investigación por espionaje ilegal durante el mandato de su padre.
Esta acción es una continuación de la operación desplegada la semana pasada para desarticular una presunta trama en la que miembros de la Agencia Brasileña de Inteligencia (Abin) y policías federales espiaron irregularmente a adversarios de Bolsonaro e intentaron favorecer a sus hijos.
Los agentes buscan avanzar sobre el núcleo político de esta organización ilícita, identificando a los principales destinatarios y beneficiarios de las informaciones producidas ilegalmente por la Abin a través de acciones clandestinas, según informó la corporación.
Registro en la oficina y el domicilio de Carlos Bolsonaro
La Cámara Municipal de Río de Janeiro confirmó que la Policía registró la oficina de Carlos Bolsonaro durante dos horas, en busca de pruebas. Además, se allanó el domicilio del edil y se decomisaron documentos y varios computadores, incluyendo al menos uno de la Abin, en otras direcciones inspeccionadas este lunes.
También se cumplió una orden de registro en la casa de la familia Bolsonaro en Angra dos Reis, donde el expresidente realizó un directo en redes sociales en compañía de tres de sus hijos. Sin embargo, en el momento de las búsquedas, ni el expresidente ni sus hijos se encontraban en la vivienda, ya que habían salido a pescar con unos amigos.
Carlos Bolsonaro bajo sospecha
Las autoridades brasileñas sospechan que Carlos Bolsonaro era uno de los destinatarios de la información obtenida ilegalmente por la Abin. Además de esta investigación por espionaje ilegal, el concejal de 41 años también está siendo investigado por el desvío de recursos públicos a través de la contratación de asesores fantasma.
En total, la Policía Federal cumplió nueve órdenes de allanamiento en diferentes localidades. Este caso se encuentra en la Corte Suprema y apunta directamente al diputado federal Alexandre Ramagem, quien fue jefe de la Abin durante la administración de Bolsonaro.