Una iniciativa polémica
La Comisión por la Paz y el Entendimiento es la iniciativa del Gobierno de Chile para catastrar la demanda completa de tierras en el marco del conflicto indígena que asola la zona sur del país. Aunque el título de la comisión evoca cosas positivas y necesarias, la bajada al titular revela la complejidad del planteamiento de fondo.
La comisión no solo busca catastrar, sino también proponer mecanismos y medidas concretas que permitan avanzar en la devolución de tierras mapuches en plazos acotados. Sin embargo, ¿está preparado el país para financiar un plan de compras a gran escala en medio de una recesión técnica? ¿Qué sucederá si las tierras puestas en el catastro no están disponibles para ser vendidas?
Implicaciones en la sociedad
Un plan de este tipo no solo multiplicará el malestar ciudadano ante un eventual uso mal priorizado de recursos públicos, sino que también aumentará el resentimiento y racismo contra los representantes indígenas, quienes son vistos crecientemente como aprovechadores y saco roto de fondos públicos. Esto generará expectativas en esos mismos dirigentes que luego será imposible de satisfacer, generando a su vez mayor frustración y resentimiento contra el Estado. Una receta perfecta para la multiplicación de los conflictos.
Efecto inmediato
La formación de una comisión que estudie la devolución de tierras mapuche multiplicará el incentivo por las tomas de tierras. Es probable que en los próximos meses veamos más predios marcados y más violencia asociada a la toma de fundos agrícolas, forestales, turísticos, industriales, parques nacionales o reservas privadas. Lo importante para dirigentes indígenas inescrupulosos será clavar banderas y marcar el novillo, lo que generará una triste situación en la que pagarán justos por pecadores, ya que, mientras la mayoría de los mapuches rechaza la violencia y confrontación, será en su nombre que se estimulará mayor violencia y confrontación.
Conclusión
La Comisión por la Paz y el Entendimiento es una iniciativa polémica que busca solucionar el conflicto indígena en Chile. Sin embargo, su propuesta de devolución de tierras mapuches plantea interrogantes sobre su viabilidad financiera y sus implicaciones en la sociedad y en los representantes indígenas. Es necesario buscar soluciones más integrales y sostenibles que permitan avanzar en la resolución del conflicto sin generar mayores tensiones y conflictos.