Las sirenas de alerta antiaérea han vuelto a sonar en varias zonas del norte y centro de Israel, después de que el Ejército israelí detectara el lanzamiento de múltiples misiles desde territorio iraní. Esta es la última escalada en el conflicto en curso entre los dos países, que se ha intensificado en los últimos días con ataques cruzados.
Según un comunicado de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), las defensas aéreas israelíes han sido activadas para «interceptar y atacar donde sea necesario» con el fin de eliminar la amenaza. «Se han activado alertas en varias zonas del norte del país tras la detección de misiles lanzados desde Irán», reza el comunicado.
Evacuación en Bnei Brak
Las autoridades iraníes habían emitido previamente una orden de evacuación para los residentes de Bnei Brak, una ciudad situada en la periferia de Tel Aviv, en respuesta a los bombardeos israelíes de los últimos días. Según las FDI, por el momento no se han reportado nuevos daños personales.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha afirmado que las fuerzas israelíes «controlan el cielo de Teherán» en el marco de su campaña de bombardeos contra territorio iraní, que se inició el viernes pasado. Netanyahu ha reiterado que el objetivo de estos ataques es destruir los programas nuclear y balístico de Irán.
Ataques cruzados
Este nuevo ataque de misiles iraníes se produce después de que las FDI bombardearan la sede de la televisión pública iraní, IRIB, en Teherán. La Media Luna Roja de Irán ha denunciado que uno de sus trabajadores resultó herido en este ataque «directo».
La escalada de violencia entre Israel e Irán se ha intensificado en las últimas semanas, con ataques y contraataques que amenazan con desencadenar un conflicto de mayores proporciones. Expertos advierten que la situación es extremadamente volátil y que se requiere una intervención diplomática urgente para evitar una guerra abierta entre ambos países.
