En un veredicto cargado de incertidumbre, un jurado popular declaró este miércoles culpable al ex productor de Hollywood Harvey Weinstein de un delito de agresión sexual en primer grado contra una antigua asistenta de producción, Miriam Haley, quien lo acusó de haberle practicado sexo oral a la fuerza en 2006.
Weinstein, quien ya había sido condenado en este mismo tribunal hace 5 años, podría enfrentar ahora un máximo de 25 años de cárcel por este nuevo cargo, según un informe de la agencia EFE. Sin embargo, el jurado lo declaró no culpable de otro delito de agresión sexual en primer grado relacionado con la demanda de la modelo Kaja Sokola.
Veredicto entre acusaciones y amenazas
El veredicto de hoy miércoles 11 de junio se alcanzó tras una turbulenta sesión que hizo perder los nervios al propio Weinstein, quien con voz ronca dijo ser víctima de un juicio «injusto» y pidió en voz alta encontrar un jurado diferente y repetir el proceso.
De hecho, el presidente del jurado había reportado amenazas a su integridad física apenas una hora antes de que se alcanzaran los dos primeros veredictos por unanimidad, asegurando que se estaban considerando hechos no juzgados en el proceso.
Condena previa revocada
Weinstein fue sentenciado en 2020 a 23 años de prisión por las denuncias de Haley y de la actriz Jessica Mann, quien afirmó ser violada por el magnate audiovisual en un hotel de Nueva York en 2013. Sin embargo, esa condena fue revocada por un estrecho margen de 4-3 hace poco más de un año en un tribunal de apelaciones, alegando un error procesal.
Más cargos pendientes
A este nuevo proceso se sumó también la demanda de Sokola, una mujer polaca que conoció a Weinstein cuando era una joven modelo y que asegura que el productor también la obligó a practicarle sexo oral en 2006. Weinstein aún enfrenta un cargo restante de violación en tercer grado que involucra a Jessica Mann, y sobre el cual el jurado aún delibera.
A sus 73 años, Weinstein cumple desde 2022 otra condena de 16 años por violación y agresión sexual en Los Ángeles, además de haber permanecido recluido durante todo este juicio en la prisión del hospital neoyorquino Bellevue debido a la leucemia y problemas cardíacos que padece.
