Evelyn Matthei, la candidata respaldada por el legado de Sebastián Piñera, se ha posicionado como la esperanza para continuar y mejorar el proyecto político del expresidente. En un acto conmemorativo por los 15 años del primer gobierno de Piñera, Cecilia Morel, ex primera dama, hizo un llamado explícito a apoyar a Matthei, reconociendo en ella la capacidad de liderar el país.
Morel destacó que el «mayor legado» de Piñera fue su equipo de trabajo, conformado por «profesionales de excelencia, jóvenes preparados y con ansias de aprender». Citando la filosofía del exmandatario, Morel afirmó que «los problemas no se miran, se enfrentan y se resuelven».
Diversos líderes de Chile Vamos, como el diputado y presidente de la UDI, Guillermo Ramírez, y el senador Rodrigo Galilea, coincidieron en que Matthei debe «tomar la posta» del legado piñerista. Ramírez vinculó los desafíos actuales, como la reconstrucción económica y la lucha contra el crimen, con los enfrentados por Piñera, asegurando que «Evelyn tiene el coraje para avanzar en esta reconstrucción».
Por su parte, Evelyn Matthei agradeció a la familia Piñera y recordó su rol como ministra del Trabajo en 2010, cuando «creamos un millón de empleos». Resaltó avances como el posnatal de seis meses y la reducción de la jornada laboral para trabajadoras de casa particular, afirmando que «les cambió la vida».
La candidata delineó su programa, enfocado en tres pilares: seguridad nacional, con cárceles de máxima seguridad y fuerzas armadas protegiendo fronteras; economía, con la lucha contra la corrupción; y salud, eliminando listas de espera y creando «escuelas de excelencia».
Matthei hizo un llamado a incorporar a nuevos actores, afirmando que «necesitamos a quienes nunca han participado en política, pero se unen a nuestros equipos». Además, criticó la polarización, señalando que «los chilenos tienen demasiados problemas; estamos para solucionarlos, no para dividir».
Cerrando su intervención, Matthei citó una frase de Piñera: «Seamos nosotros mejores, porque los tiempos serán mejores». Asimismo, selló su discurso con una promesa: «Chile va a volver a ser el país del que todos nos sentiremos orgullosos».
