En un caso que sacude a la región de Los Ríos, ha comenzado el juicio oral contra el representante legal de una empresa constructora acusado del delito de estafa que afectó a más de 40 familias. Según la investigación del Ministerio Público, el imputado, Marcelo Alejandro Arias Guzmán, ofrecía casas prefabricadas, recibía el dinero de los clientes, pero nunca les entregaba el producto prometido.
Los hechos habrían ocurrido entre 2016 y 2018, y si bien se identificaron más de 40 víctimas, solo 32 casos forman parte de este juicio que se lleva a cabo esta semana en el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Valdivia. La Fiscalía y la Policía de Investigaciones lograron establecer que Arias mantenía una oficina comercial y un galpón donde supuestamente construía los inmuebles, mientras que en el patio exhibía algunas casas modelo para que los clientes eligieran.
Sin embargo, cuando las familias entregaban un porcentaje del monto total acordado, el representante legal de la empresa se desentendía del tema, empezaba a entregar excusas y no concretaba su parte del acuerdo, pese a haber firmado un contrato. Según el fiscal José Rivas, todo esto constituye el delito de estafa cometido de manera reiterada.
Algunas de las víctimas recuerdan haber firmado contratos para adquirir kits básicos que incluían una casa y dos cabañas, con fecha de entrega pactada, pero aún siguen esperando por sus viviendas después de haber cancelado hasta el 90% del valor. Otros denunciantes señalan que el contacto inicial lo hicieron por redes sociales y su error fue no verificar si la empresa tenía denuncias previas por incumplimiento.
En caso de ser condenado, Arias arriesga una pena que podría bordear los 5 años de prisión, incluso con la posibilidad de cumplirla en libertad. Después de la eventual sentencia, cada uno de los denunciantes podrá presentar una demanda civil para intentar recuperar, al menos, una parte del dinero invertido, siempre y cuando el imputado cuente con patrimonio suficiente.
Este caso pone de manifiesto la importancia de verificar antecedentes y garantías antes de realizar cualquier inversión, especialmente en el sector de la construcción, donde lamentablemente se han registrado numerosos casos de estafas y engaños a consumidores.
