El presidente de Argentina, Javier Milei, ha cancelado su visita privada a Chile, donde tenía previsto participar en un seminario el próximo 11 de marzo. Esta decisión se produce en medio de la escasa relación que mantiene Milei con su homólogo chileno, Gabriel Boric, a quien no ha logrado reunirse en más de un año a pesar de haber visitado el país.
Según se informó, Milei iba a ser el principal invitado de una actividad organizada por la empresa Vinci Compass en la comuna de Las Condes. La visita formaba parte de una gira internacional que también incluía paradas en España e Israel. Incluso, la Fuerza Aérea Argentina había solicitado permiso para el sobrevuelo y aterrizaje del avión presidencial en Chile.
Sin embargo, desde la embajada argentina en Chile se comunicó que finalmente el presidente Milei no viajará a nuestro país, sin dar mayores detalles sobre las razones de esta decisión. Es importante destacar que, pese a que ambos han tenido públicas diferencias, desde que asumieron sus respectivas jefaturas de Estado han mantenido una relación de respeto mutuo
, señalaron.
Tensión entre Milei y Boric
La cancelación de la visita de Milei refleja la tensa relación que mantiene con el presidente Boric. De hecho, esta iba a ser la segunda vez en menos de un año que el mandatario argentino no lograba reunirse con su par chileno durante una visita a nuestro país.
En agosto del año pasado, Milei llegó a Santiago para una breve visita «privada» que se extendió por unas horas. En esa ocasión, tampoco hubo un encuentro programado con Boric, a pesar de que ambos líderes han participado juntos en cumbres internacionales como la de Ucrania en Suiza.
Diferencias Ideológicas
Las diferencias ideológicas entre Milei y Boric son evidentes. Mientras el presidente argentino se define como un libertario de derecha, Boric lidera un gobierno de izquierda en Chile. Esto ha generado tensiones y desencuentros entre ambos mandatarios, quienes no han logrado establecer una relación de trabajo fluida.
No obstante, desde las embajadas se ha señalado que, a pesar de estas diferencias públicas, Milei y Boric han mantenido un trato respetuoso en sus interacciones. Esto sugiere que, si bien las posturas políticas de ambos líderes son opuestas, han procurado mantener un diálogo cordial en el ámbito diplomático.
