A partir del próximo jueves 5 de diciembre, la calzada sur de la Alameda y la avenida Providencia quedarán destinadas exclusivamente al transporte público con dirección hacia el oriente. Esta medida, que se extenderá por 3 meses, forma parte del proyecto Nueva Alameda, cuyo objetivo es renovar el entorno urbano de Plaza Italia.
El tramo afectado comprende desde Ramón Corvalán hasta Seminario, y las autoridades han hecho un llamado a los conductores de vehículos particulares a evitar transitar por el sector y planificar rutas alternativas. Según el delegado presidencial regional, Gonzalo Durán, si bien esta intervención generará dificultades, especialmente durante la temporada navideña, es el momento ideal para minimizar el impacto en las comunidades.
Educación y Fiscalización para una Transición Fluida
Para facilitar la adaptación de los conductores, las autoridades implementarán una marcha blanca inicial con el objetivo de educar a los usuarios. Sin embargo, la teniente coronel de Carabineros, Estrella Sotelo, advirtió que posteriormente se notificarán infracciones a quienes no respeten las señaléticas.
Además de las restricciones en la Alameda y avenida Providencia, también habrá limitaciones en calle Bustamante y avenida Vicuña Mackenna para evitar el ingreso de vehículos particulares al área intervenida. El seremi de Transportes, Rodrigo Valladares, recomendó utilizar vías paralelas como Carmen y General Jofré, y aseguró que los desvíos están actualizados en plataformas como Waze y Google Maps.
Beneficios a Largo Plazo para la Comunidad
Si bien estas restricciones generarán inconvenientes temporales, el rediseño del Nudo Baquedano traerá importantes mejoras a la movilidad y el espacio público de la zona. Entre los cambios se incluye la eliminación de la rotonda, la incorporación de 200 árboles y la creación de nuevos cruces peatonales que conectarán los parques Bustamante, Balmaceda y Forestal.
Los vecinos del sector podrán solicitar distintivos para circular en el tramo cerrado, presentando certificado de residencia y documentos adicionales a la empresa Icafal, encargada de la obra. De esta manera, se busca minimizar el impacto en la comunidad durante la ejecución del proyecto.
En resumen, la transformación urbana de Plaza Italia, si bien conlleva desafíos temporales en la movilidad, promete beneficios a largo plazo para los residentes y visitantes de la zona, con una mejora sustancial en la conectividad peatonal y la calidad del espacio público.
