La Batalla Legal Contra la Extracción Ilegal de Arena en el Río Bío Bío

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En la región del Bío Bío, la empresa Tridente ha estado extrayendo arena del río Bío Bío sin contar con los permisos necesarios, desafiando a las autoridades y poniendo en riesgo el delicado ecosistema de la zona. A pesar de los esfuerzos del municipio de Hualpén y de organismos como la Dirección General de Aguas (DGA) y la Superintendencia de Medio Ambiente, la empresa sigue operando sin consecuencias.

Una Actividad Ilegal que Persiste

Tridente, una empresa instalada en la ribera norte del Bío Bío desde hace casi dos décadas, se ampara en la tenencia de una concesión minera para extraer y comercializar arena, sin contar con los permisos ambientales, municipales ni sectoriales requeridos. Pese a que las autoridades han intentado hacer cumplir la ley a través de fiscalizaciones y decretos de clausura, la empresa ha logrado evadir estas medidas y continuar con su actividad extractiva.

La Dispersión de Responsabilidades, un Obstáculo

Según el asesor jurídico del municipio de Hualpén, Lautaro Benítez, la dispersión de responsabilidades entre las diferentes entidades encargadas de fiscalizar la actividad de Tridente ha favorecido al infractor. Esto ha dificultado la aplicación efectiva de sanciones y el cierre definitivo de la operación ilegal.

Esfuerzos Legales Infructuosos

A pesar de que la DGA ha ordenado en repetidas ocasiones a Tridente que paralice la extracción de agua y áridos del río Bío Bío, y de que la Superintendencia de Medio Ambiente le ha notificado sobre la necesidad de ingresar al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental, la empresa ha logrado evadir estas medidas. Incluso, se ha informado que no existe una investigación en curso por parte del Ministerio Público, a pesar de las denuncias presentadas por las autoridades.

Hacia una Solución Integral

Desde el municipio de Hualpén, se ha instruido la modificación del Plan Regulador para prohibir completamente la extracción de áridos en toda la comuna. Esto busca cerrar la puerta a este tipo de actividades ilegales y proteger el valioso ecosistema del río Bío Bío.

Es un problema grave y que en parte se debe a que no es solo uno el organismo el encargado de fiscalizar que la arenera opere en regla, reconoce el asesor jurídico del municipio.

La lucha por detener la extracción ilegal de arena en el Bío Bío continúa, y se espera que las autoridades logren coordinar esfuerzos efectivos para poner fin a esta actividad que pone en riesgo el medioambiente de la región.

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