La Araucanía Sigue a Oscuras: Más de 700 Clientes Sin Energía Eléctrica Tras Sistema Frontal
La región de La Araucanía en Chile sigue sufriendo las consecuencias del paso de un sistema frontal hace más de dos semanas. Según los últimos reportes, cerca de 700 clientes aún permanecen sin energía eléctrica, lo que ha generado una crisis sin precedentes en la zona.
Los sectores rurales de Victoria, Lautaro y Freire han sido los más afectados, siendo todos ellos clientes de la empresa Codiner, la única que aún no ha logrado restablecer el servicio en su totalidad. Esto ha llevado al delegado Presidencial de La Araucanía, José Montalva, a solicitar que se le quite la concesión a Codiner por la polémica y lenta reposición del servicio de electricidad.
Esfuerzos por Restablecer el Servicio
Ante esta situación, brigadas de las empresas CGE y Frontel han estado ayudando a Codiner en la reposición del tendido eléctrico. Sin embargo, la compañía no ha cumplido con los plazos establecidos para la restitución del servicio, correspondientes al 10 y 14 de agosto.
El seremi de Energía, Camilo Villagrán, ha asegurado que quitar la concesión a Codiner es algo que se debe hacer de manera responsable y gradual. Esto con el fin de garantizar que los clientes afectados puedan recuperar el servicio eléctrico lo antes posible.
Esperanza de Reposición Total
A pesar de los desafíos, las autoridades esperan que para la próxima semana esté repuesto el 100% del servicio de electricidad en la región. Sin embargo, la lentitud de Codiner en la restitución del servicio ha generado un profundo malestar entre los habitantes de La Araucanía, quienes llevan más de dos semanas a oscuras.
Conclusión
La crisis eléctrica en La Araucanía es un claro ejemplo de la importancia de contar con empresas eléctricas eficientes y comprometidas con sus clientes. Mientras las autoridades buscan soluciones, los habitantes de la región siguen esperando ansiosamente el regreso de la luz a sus hogares.
Esta situación ha puesto en evidencia la necesidad de mejorar la resiliencia y la capacidad de respuesta del sistema eléctrico chileno ante eventos climáticos extremos. Solo así podremos garantizar un suministro eléctrico confiable y oportuno para todos los ciudadanos.
