La industria metalúrgica y metalmecánica de Chile está a la expectativa del próximo ciclo político, con más de la mitad de las empresas reconociendo que sus decisiones de inversión dependerán del resultado de las elecciones presidenciales.
Según una encuesta realizada por la Asociación de Industrias Metalúrgicas y Metalmecánicas (Asimet), un 56% de las empresas socias afirma que más de la mitad de sus inversiones se verán afectadas por el desenlace electoral. Esta situación refleja un escenario de prudencia y expectación en el sector, que busca certezas para planificar a largo plazo.
Expectativas y Prioridades de la Industria
La encuesta de Asimet también reveló que el 70% de las empresas considera que el ambiente económico actual es incierto o muy incierto, lo que complica la planificación a largo plazo. Sin embargo, el 85% prevé que su crecimiento se mantenga o aumente el próximo año, y el 65% estima un alza promedio del Producto Interno Bruto (PIB) de Chile entre 2% y 3% anual en los próximos cuatro años.
En cuanto a las prioridades que debería tener la próxima administración, las empresas socias de Asimet colocan en primer lugar el crecimiento económico y el empleo, seguido por la seguridad pública y la educación. De hecho, el 65% considera que la seguridad tiene un impacto alto o muy alto en su actividad productiva.
Llamado a Impulsar la Industria Manufacturera
El presidente de Asimet, Fernando García, resaltó que el sector manufacturero en Chile representa solo el 9% del PIB, mientras que el promedio mundial es cercano al 15%. Esta pérdida de peso industrial es un llamado de atención, según García, quien afirmó que «Chile necesita reencontrarse con su capacidad de crear valor, de producir y de innovar».
Además, el gremio industrial señaló que la ausencia de instrumentos efectivos de defensa comercial deja en desventaja a las empresas chilenas frente a la competencia internacional, con importaciones con precios distorsionados o con menores exigencias laborales y ambientales.
En este sentido, García concluyó que «la industria es empleo, es inversión y es desarrollo. Si el próximo Gobierno entrega certezas, impulsa la innovación y establece reglas equitativas de competencia, estaremos construyendo un Chile más competitivo, más estable y con verdadera esperanza de futuro».
