Una nueva polémica ha surgido en el seno del oficialismo, luego de que se revelara que el Frente Amplio (FA) instruyó a sus alcaldes a no reunirse con candidatos al Congreso que no pertenezcan a su mismo partido, incluso si forman parte de otras colectividades gubernamentales.
El incidente salió a la luz cuando el equipo del senador socialista José Miguel Insulza intentó coordinar una reunión con la alcaldesa de Viña del Mar, Macarena Ripamonti (FA), para abordar temas relacionados con el futuro del terreno de Las Salinas. Sin embargo, la solicitud fue rechazada.
En conversación con Radio Infinita, Insulza explicó que «me dijeron que no, que no se podía porque la alcaldesa no podía hacer reuniones políticas, salvo con su partido, hasta después de las elecciones». El parlamentario lamentó la decisión, calificándola como «limitante y un poco abusiva», y precisó que la cita buscaba únicamente discutir el proceso de recuperación y uso del emblemático terreno viñamarino.
Apoyo exclusivo dentro del bloque
Cabe destacar que el diputado Diego Ibáñez (FA), quien postula al Senado por la Región de Valparaíso, publicó un video junto a la alcaldesa Ripamonti en su cuenta de X, reforzando la idea de apoyo exclusivo dentro del bloque.
«Queríamos iniciar una conversación sobre qué se iba a hacer con el lugar, si un parque o viviendas», añadió Insulza.
Roces entre partidos oficialistas
Este episodio se suma a una serie de roces entre partidos oficialistas durante el periodo electoral. Hace pocos días, una publicación en redes sociales del senador socialista Tomás de Rementería, llamando a votar por su pareja, la diputada comunista Karol Cariola, generó molestia en el Partido Socialista (PS), que consideró el gesto como una falta de respeto hacia la candidatura de Insulza en la misma región.
De Rementería desestimó la controversia, calificándola como una «polémica artificial» y defendiendo su respaldo tanto a Insulza como a Cariola. En paralelo, el Partido Comunista reafirmó su compromiso con la candidatura senatorial de Cariola y la reelección del diputado Luis Cuello, quien también criticó la postura del parlamentario socialista.
Estos incidentes reflejan la tensión que se vive en el seno del oficialismo a pocos días de las elecciones, con partidos que parecen priorizar sus intereses particulares por sobre la unidad del bloque gubernamental.
