Más de un mes después de la adjudicación de las nuevas cámaras de televigilancia en Viña del Mar, los concejales del municipio han exigido a la alcaldesa Macarena Ripamonti que entregue actualizaciones sobre el proceso de activación de estos equipos.
Cabe recordar que el proceso de adquisición de las cámaras tuvo una primera votación polémica en junio, donde los concejales se abstuvieron sin dar un argumento legal. Posteriormente, en una segunda votación realizada en septiembre, se logró aprobar el proyecto que aumenta el número de cámaras de 122 a 215 en la ciudad.
Urgencia en la instalación
Sandro Puebla, quien se abstuvo en la primera votación pero luego aprobó el proyecto, ha emplazado a la administración de Ripamonti a priorizar la instalación de las cámaras antes de fin de año y el inicio de la temporada estival.
La distribución de las cámaras se planificó en base a solicitudes de las Juntas de Vecinos y recomendaciones de Carabineros, la PDI, la Policía Marítima y la Fiscalía.
Presupuesto y plazos
La empresa Global Link S.A. se adjudicó el proyecto con un presupuesto superior a los $6.000 millones y un plazo de vigencia de cinco años. Antonella Pecchenino, quien votó a favor en ambas instancias, considera que este es un tiempo prudente entre la firma del contrato y la instalación, aunque afirma que, de no haber habido errores en la primera votación, las cámaras ya estarían implementadas.
Puntos críticos y de criticidad media y baja
Con la urgencia solicitada por los concejales, las cámaras deberán ser instaladas en 92 puntos críticos y otros 123 puntos de criticidad media y baja en la ciudad.
Este sistema de videovigilancia es clave para mejorar la seguridad de Viña del Mar, y los concejales buscan asegurar que su implementación se realice de manera oportuna y eficiente.
