En un giro inesperado de los acontecimientos, el Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago se ha visto envuelto en un caso de asesinato que ha conmocionado a la comunidad. Jorge Ugalde, un psicólogo de profesión, ha sido acusado del delito de homicidio calificado con alevosía y premeditación por la muerte de su cuñado, Eduardo Cruz-Coke, y los dos hijos gemelos de 17 años de este último.
Según la investigación liderada por la Fiscalía Oriente, el crimen no fue un doble parricidio seguido de suicidio, como se había creído inicialmente. Por el contrario, las autoridades sospechan que Ugalde asesinó a su propia familia por un conflicto relacionado con propiedades.
Un Conflicto Familiar Mortal
La trama se remonta a 2014, cuando Trinidad Cruz-Coke, la esposa de Ugalde y hermana de Eduardo, formó una sociedad junto a sus padres y su marido. Esta sociedad era propietaria de dos departamentos en Santiago y un terreno en La Reina, donde vivía Ugalde con su esposa.
Cuando los padres de Trinidad y Eduardo fallecieron, las propiedades se convirtieron en herencia. Aquí es donde surgió el problema: Eduardo se habría negado a vender el terreno de La Reina, lo que habría generado un conflicto con su hermana y cuñado.
Un Intento de Asesinato Previo
Según la investigación, en 2024 hubo un primer intento de asesinato. Ugalde y Trinidad habrían obsequiado helados envenenados a Eduardo y a sus hijos adolescentes. Afortunadamente, este episodio no fue denunciado a las autoridades en su momento.
Ahora, la Fiscalía Oriente ha solicitado la prisión preventiva para Ugalde, acusado de cometer el triple homicidio con alevosía y premeditación, además de las agravantes de actuar contra menores de 18 años y víctimas con afinidad familiar.
Una Tragedia Familiar Devastadora
Este caso pone de manifiesto cómo la codicia y los celos pueden llevar a actos de violencia extrema dentro de una misma familia. La pérdida de Eduardo Cruz-Coke y sus dos hijos gemelos es una tragedia que ha conmocionado a la comunidad y que demuestra la importancia de resolver los conflictos familiares de manera pacífica y constructiva.
A medida que la investigación continúa, es crucial que se haga justicia y que se eviten este tipo de desenlaces fatales en el futuro. La sociedad debe reflexionar sobre cómo prevenir y abordar de manera efectiva los problemas que surgen en el seno de las familias.
