El Aeropuerto Internacional de Bruselas-Zaventem, uno de los principales hubs de Bélgica, se vio obligado a cerrar completamente su espacio aéreo este martes debido a la presencia de tres drones detectados cerca de la terminal poco antes de las 8:00 pm hora local.
Según informes del diario local Het Laatste Nieuws, varios vuelos que se dirigían a Bruselas tuvieron que ser desviados a otras ciudades belgas como Lieja, Charleroi o Brujas, e incluso a aeropuertos extranjeros como París o Fráncfort (Alemania). Los pasajeros de uno de estos vuelos, que despegó en Madrid con destino a Bruselas, aterrizaron finalmente en Charleroi, donde tuvieron que repostar debido a la falta de combustible para mantener el circuito de espera.
Respuesta de las Autoridades
Desde la terminal de Zaventem, las autoridades aeroportuarias señalaron a Het Laatste Nieuws que estaban «investigando el asunto» y que, por el momento, no había vuelos programados ni para aterrizar ni para despegar del Aeropuerto de Bruselas-Zaventem.
En las últimas semanas, se han avistado varios drones cerca de infraestructuras sensibles en Bélgica, incluyendo la base aérea militar de Kleine-Brogel, cercana a la frontera con Países Bajos. Ante esta situación, las autoridades belgas están preparando un plan acelerado de respuesta, y mientras tanto, el Ejército ha recibido órdenes de derribar los drones si pueden hacerlo de forma segura y «sin causar daños colaterales».
¿Espionaje Ruso?
En una entrevista en la televisión local VTM, el Ministro de Defensa de Bélgica, Theo Francken, apuntó que los recientes vuelos de drones sobre bases militares y aeropuertos belgas podrían tratarse de intentos de espionaje por parte de Rusia. Aunque admitió que las autoridades belgas «no tienen información concreta sobre el origen de los drones», el titular de Defensa señaló la posible responsabilidad de Moscú, en línea con otras incursiones de drones en el espacio aéreo de países bálticos y del este de Europa.
La seguridad de las infraestructuras críticas es una prioridad para las autoridades belgas, que están tomando medidas urgentes para hacer frente a esta amenaza aérea y evitar futuros incidentes que puedan paralizar el tráfico en el Aeropuerto de Bruselas-Zaventem.