En un mundo cada vez más volátil e impredecible, las empresas líderes deben desarrollar estrategias resilientes para asegurar la continuidad de sus operaciones. Tal es el caso de Ferrero, la compañía italiana detrás de icónicos productos como Nutella, Kinder y Ferrero Rocher, que ha logrado sortear los desafíos del mercado global de avellanas gracias a una sólida diversificación de sus fuentes de abastecimiento.
Cuando Turquía, el principal productor mundial, enfrentó una escasez de avellanas por factores climáticos y plagas, Ferrero supo reaccionar rápidamente. En lugar de depender exclusivamente de este proveedor, la empresa había construido previamente una cadena de suministro diversificada que le permite acceder a avellanas de alta calidad en países como Chile, Estados Unidos e Italia.
Según el comunicado de Ferrero, esta estrategia «contribuye a fortalecer la resiliencia frente a las fluctuaciones del mercado y del clima, en beneficio tanto de los productores como de los consumidores». Al no quedar atada a un solo origen, la compañía puede garantizar «un suministro constante durante todo el año» para sus productos estrella, como la famosa Nutella.
Chile, un Socio Estratégico para Ferrero
Dentro de esta diversificación global, Chile destaca como un proveedor clave de avellanas para Ferrero. Durante la reciente visita oficial del presidente Gabriel Boric a Italia, se celebró la sólida relación comercial entre ambos países, poniendo como ejemplo el caso de Ferrero y su filial Agrichile.
Esta asociación no solo asegura el abastecimiento de un ingrediente fundamental, sino que también genera empleo y desarrollo en el sector agrícola chileno. Ferrero ha reconocido la calidad y el liderazgo global de Chile en la producción de avellanas, lo que le ha permitido consolidar una cadena de suministro resiliente y sostenible.
Un Modelo de Abastecimiento Responsable y a Largo Plazo
Más allá de la diversificación geográfica, Ferrero subraya que su enfoque de abastecimiento se basa en «inversiones a largo plazo, abastecimientos diversificados y prácticas responsables». Esto le ha permitido garantizar la calidad, resiliencia y crecimiento sostenible de su negocio, incluso en tiempos de turbulencia en el mercado de materias primas.
Al adoptar este modelo holístico, Ferrero demuestra su compromiso con la sostenibilidad y el desarrollo de los productores a nivel mundial. Una estrategia que, sin duda, le ha brindado una ventaja competitiva clave en un entorno cada vez más volátil e impredecible.
