En una medida sin precedentes, el gobierno de Japón ha anunciado que desplegará a las Fuerzas de Autodefensa (Ejército) para hacer frente a los cada vez más frecuentes y mortales ataques de osos a la población humana. Shinjiro Koizumi, el nuevo ministro de Defensa, reveló en una rueda de prensa que enviarán una delegación militar a la prefectura de Akita, en el norte del país, para coordinar esfuerzos con las autoridades locales y determinar la mejor manera de ayudar.
Esta decisión se produce después de que Japón haya registrado al menos 10 ataques mortales de osos desde principios de abril, la mayor cifra registrada hasta la fecha. Según el gobernador de Akita, Kenta Suzuki, quien acudió al Ministerio de Defensa para solicitar apoyo, la población ha pedido sobre todo «ayuda para la captura y la exterminación» de estos animales, por ejemplo, mediante el uso de trampas.
Una amenaza creciente para los ciudadanos
La situación se ha vuelto cada vez más grave a medida que las zonas rurales de Japón se han ido despoblando, dejando a los osos sin su hábitat natural. El pasado viernes, un hombre de 38 años murió tras sufrir el ataque de un oso en una aldea de Akita, elevando a 10 el número de víctimas mortales en lo que va del año fiscal japonés (que comienza en abril). Además, al menos 78 personas han resultado heridas en estos incidentes, según datos de la cadena pública NHK.
Cambios en la legislación para una respuesta más ágil
En septiembre, Japón revisó la ley sobre protección y gestión de la vida silvestre para autorizar el disparo preventivo de osos en zonas urbanas, con el objetivo de agilizar la respuesta de las autoridades ante esta amenaza. Hasta entonces, la caza de animales estaba prohibida en principio en espacios públicos, y solo la Policía podía permitirla en caso de peligro inminente.
Sin embargo, la nueva ley de Defensa de Japón no permite que los soldados lleven a cabo la ejecución directa de los osos, por lo que el gobierno tendrá que «considerar qué tipo de sistema y de respuesta» es apropiada para hacer frente a esta situación sin precedentes.
Una medida excepcional para una crisis sin precedentes
El despliegue de las Fuerzas de Autodefensa para hacer frente a los ataques de osos a la población civil marca un hito en la historia de Japón. Esta decisión refleja la gravedad de la crisis y la necesidad de una respuesta integral y coordinada entre las autoridades nacionales y locales.
A medida que la presencia de los osos en las zonas habitadas se vuelve cada vez más amenazante, Japón se enfrenta al desafío de proteger a sus ciudadanos sin poner en riesgo el delicado equilibrio de la vida silvestre. La movilización del Ejército es una medida excepcional, pero necesaria, para hacer frente a esta situación sin precedentes.