En una reunión con altos mandos militares, el presidente ruso Vladimir Putin ha anunciado el éxito de las pruebas finales del misil de crucero con propulsión nuclear Burevéstnik. Este arma, que Putin califica como «única que nadie más tiene en el mundo», representa un hito tecnológico para las fuerzas armadas rusas.
Según informó el jefe del Estado Mayor del Ejército ruso, Valeri Guerasimov, el misil recorrió una distancia de 14.000 kilómetros durante casi 15 horas de vuelo el pasado 21 de octubre, demostrando «sus grandes posibilidades a la hora de eludir los sistemas antiaéreos y antimisiles».
Características Técnicas Avanzadas
Guerasimov destacó que «las características técnicas del Burevéstnik permiten su empleo con precisión garantizada contra objetivos altamente defendidos a cualquier distancia». Putin, por su parte, recordó que en su momento se consideraba que este proyecto era «irrealizable».
El desarrollo de este misil de crucero con propulsión nuclear se enmarca en la respuesta de Rusia al abandono por parte de Estados Unidos, en 2001, del Tratado Antimisiles suscrito durante la Guerra Fría. Esto llevó a Moscú a impulsar el programa del Burevéstnik como una contramedida a la expansión del escudo antimisiles estadounidense.
Una ‘Arma Única’ sin Igual
Putin enfatizó que el Burevéstnik es un arma «única que nadie más tiene en el mundo». Esta declaración subraya la importancia estratégica que Rusia le otorga a este misil de crucero con propulsión nuclear, considerándolo un activo clave en su arsenal militar.
La prueba exitosa del Burevéstnik representa un hito tecnológico para Rusia, que ahora se prepara para incorporar este armamento a sus fuerzas armadas. Sin duda, este desarrollo tendrá implicaciones geopolíticas y de seguridad a nivel global.
