En una noche que debía ser de celebración, la tragedia golpeó al mundo del baloncesto italiano. Un brutal ataque perpetrado por barristas, o ultras, del equipo Sebastiani Basket de Rieti acabó con la vida de un chofer de 65 años que transportaba a los aficionados del Pistoia, equipo de la Liga A2.
El incidente ocurrió a la entrada de la autopista Rieti-Terni, alrededor de las 20:50, justo después de que la escolta policial que acompañaba al autobús se hubiera retirado, temiendo posibles altercados. Según los informes, el chofer, que se encontraba en el asiento del copiloto y debía tomar el volante después, recibió un impacto mortal en la arteria carótida por un objeto punzante que atravesó el parabrisas.
Una Noche de Violencia y Luto
Los aficionados del Pistoia, que celebraban la victoria de su equipo, relataron lo ocurrido: «Estábamos tranquilos, bromeando, cuando de repente oímos lo que parecían explosiones, al menos un par, quizá más. Por suerte, la ventanilla del conductor resistió y pudo frenar rápidamente. Solo tenía un corte en la cara. El otro conductor, sin embargo, no sobrevivió».
La policía había intervenido durante el partido para evitar enfrentamientos entre las parcialidades, pero no pudo evitar esta tragedia. El equipo de Pistoia expresó su «consternación», mientras que el club de Rieti también manifestó «sus más sinceras condolencias y solidaridad con la familia del conductor fallecido» por «un acto atroz».
Reacción Conmocionada de las Autoridades
El ministro de Deportes italiano, Andrea Abodi, condenó enérgicamente el ataque: «¿Pero cómo puedes morir así, camino a casa después de un partido de baloncesto? El ataque perpetrado esta noche cerca de Rieti por criminales que se convirtieron en asesinos y que jamás podrán ser considerados aficionados es impactante. El deporte es vida, y estos criminales están a años luz de los valores deportivos».
Esta tragedia ha sacudido profundamente al mundo del baloncesto italiano, dejando una herida que tardará en sanar. Las autoridades han prometido una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos y llevar a los responsables ante la justicia. Mientras tanto, la familia del chofer fallecido y los aficionados del Pistoia lamentan la pérdida de una vida inocente en un acto de violencia que nunca debió ocurrir.