El Tren de Aragua, la organización criminal más investigada de Venezuela, está demostrando una capacidad de adaptación y expansión sin precedentes. Tras afianzarse en Sudamérica, las autoridades ahora advierten su avance hacia México, Estados Unidos y Canadá, lo que augura un cambio estratégico que está bajo la lupa de expertos a nivel continental.
La reciente detención de Arturo Echezuría Alcántara, alias Nelson, principal responsable de consolidar la estructura del Tren de Aragua en territorio mexicano, junto a otros dos miembros clave, confirma la presencia de esta organización criminal en el país norteamericano. Las acusaciones contra los detenidos incluyen delitos como trata de personas, homicidio, secuestro, tráfico de narcóticos y extorsión.
Una Organización Criminal Sui Géneris
Según la periodista venezolana Ronna Rísquez, autora del libro «El tren de Aragua, la banda que revolucionó el crimen organizado en América Latina», el Tren de Aragua no se ajusta a los patrones tradicionales de los cárteles o pandillas latinoamericanas. «No es un cartel como han operado los carteles en Colombia o en México, o no es una guerrilla. Es un grupo diferente. Tampoco es una mara. Es un grupo diferente, con unas características muy particulares», explica Rísquez.
A diferencia de otros grupos, el Tren de Aragua prefiere la negociación y la cooperación con estructuras criminales locales para acceder a nuevos territorios, evitando choques directos. Esta estrategia parece estar dando resultados, a juzgar por su expansión hacia el norte del continente.
La Figura de Maduro y el «Cartel de los Soles»
En el trasfondo de estas operaciones, la figura de Nicolás Maduro, presidente venezolano, permanece incuestionada en el centro de la discusión internacional sobre el crimen transnacional. Según Rísquez, la connivencia de militares y funcionarios gubernamentales con mercados delictivos ha permitido la consolidación de redes como el «Cartel de los Soles», del cual difiere estructuralmente el Tren de Aragua, aunque pueda funcionar como «operador logístico» en determinadas rutas para el tráfico de drogas.
Recompensas Millonarias y Designaciones de Terrorismo
Las autoridades estadounidenses y canadienses han tomado medidas drásticas para hacer frente a la expansión del Tren de Aragua. La Embajada de Estados Unidos en Colombia y la policía nacional ofrecen hasta 12 millones de dólares en recompensas por la captura de algunos de sus líderes, como Giovanny San Vicente, Yohan José Romero y Héctor Guerrero Flores.
Además, el Gobierno de Canadá ha designado oficialmente al Tren de Aragua y otras organizaciones criminales internacionales como grupos terroristas, en línea con una acción similar tomada previamente por Estados Unidos.
Un Mapa Continental en Efervescencia
La expansión del Tren de Aragua, con sus arrestos, fugas y nuevas fronteras traspasadas, está redefiniendo la geografía del crimen organizado en todo el continente americano. Mientras las autoridades intentan contener su avance, esta organización criminal demuestra una capacidad de adaptación y supervivencia que la convierte en una amenaza cada vez más global.