En un golpe contundente al narcotráfico internacional, las autoridades de Coquimbo, Chile, han logrado desmantelar una peligrosa red criminal que operaba a través de las fronteras. En un operativo conjunto entre Carabineros y otras agencias, se detuvo a tres sospechosos -un chileno, un argentino y un venezolano- que transportaban casi 300 kilos de marihuana procesada con destino al sur del país.
Según explicó el Teniente Coronel José Ramírez de la Prefectura Coquimbo, el operativo combinó inteligencia, despliegue táctico e investigación exhaustiva, enfocándose en el sector rural de La Higuera y La Serena. «Pudimos interceptar dos vehículos: el primero que abría camino, y el segundo que transportaba la droga», detalló el oficial.
Una Organización Criminal Transnacional
El hallazgo se tradujo en 18 bolsos con 173 paquetes rectangulares que contenían un total de 269 kilos 370 gramos de marihuana lista para la venta. De esta manera, se logró desarticular una organización criminal de carácter internacional que operaba a través de las fronteras.
Golpe Contundente al Narcotráfico
Para las autoridades, este operativo representa un duro golpe al tráfico de drogas en la región. «Estamos hablando de un trabajo que combinó la inteligencia, el despliegue operativo y la investigación con foco en el sector rural», explicó el Teniente Coronel Ramírez.
La incautación de esta importante cantidad de marihuana procesada evitará que llegue a las calles, impactando directamente en la cadena de suministro de los narcotraficantes. Además, la detención de los tres sospechosos, provenientes de diferentes países, sugiere la naturaleza transnacional de esta organización criminal.
Seguridad Ciudadana como Prioridad
Este operativo se enmarca en los esfuerzos continuos de las autoridades chilenas por combatir el narcotráfico y garantizar la seguridad de los ciudadanos. Al desmantelar redes criminales de este tipo, se envía un mensaje claro de que no se tolerará el tráfico de drogas en la región.
La lucha contra el crimen organizado y el narcotráfico seguirá siendo una prioridad clave para las fuerzas de seguridad, con el objetivo de mantener a las comunidades libres de la influencia de estas actividades ilícitas.