En un momento de profundo dolor y conmoción nacional, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, rindió un sentido homenaje a Charlie Kirk, el destacado activista político asesinado el pasado 10 de septiembre en un tiroteo en la Universidad del Valle de Utah (UVU).
Ante una multitud congregada en el Estadio State Farm de Arizona, Trump describió a Kirk como uno de sus más leales aliados y pilares de su campaña, que le permitió alcanzar la Casa Blanca por segunda vez. El mandatario tildó al presunto asesino, Tyler Robinson, como un «monstruo radicalizado y de sangre fría».
Un Líder Comprometido con la Libertad y la Justicia
Trump afirmó que Kirk fue asesinado «por decir la verdad que estaba en su corazón», refiriéndose a su defensa inquebrantable de la libertad, la justicia, Dios y el sentido común. «Fue asesinado violentamente porque habló en favor de la libertad y la justicia, de Dios, de la patria, de la razón y del sentido común», agregó el presidente.
Condenando el Extremismo Violento
Con un tono de profunda indignación, Trump condenó enérgicamente el acto de violencia que segó la vida de Kirk, calificando a su presunto asesino como un «monstruo radicalizado y de sangre fría». El mandatario hizo un llamado a la unidad nacional y a la defensa de los valores que Kirk representaba.
Un Legado que Perdurará
A pesar del dolor y la tragedia, Trump destacó que el legado de Charlie Kirk continuará inspirando a millones de estadounidenses que comparten su visión y compromiso con la libertad. «Su voz resonará por siempre, y su espíritu vivirá en cada uno de nosotros que luchamos por un país más justo y próspero», concluyó el presidente.