Nuestro rostro es el espejo más rápido del estrés y el cansancio, manifestándose en señales como ojeras, bolsas, flacidez y arrugas. Pero existe una solución ancestral: el yoga facial. Según las expertas, esta práctica puede rejuvenecer tu piel en solo 10 minutos al día, sin necesidad de cirugía.
Masha Marqués, una de las mayores expertas mundiales en yoga facial, afirma que esta técnica es «simple, efectiva y empoderador». En tan solo unos minutos, podemos tonificar los músculos, estimular la circulación sanguínea y linfática, liberar tensiones y favorecer la producción natural de colágeno. Lejos de perseguir la perfección, el yoga facial nos ayuda a cuidarnos de una «forma alegre, natural y constante».
Beneficios del yoga facial
Según Diana Bordón, experta en yoga facial en España, esta práctica ofrece múltiples beneficios: rejuvenece la piel, relaja, tonifica los músculos, mejora la circulación y la respiración, previene la flacidez y oxigena la piel. Todo lo que se necesita son las manos, una crema hidratante o aceite facial, y un espejo para observar los movimientos.
Ejercicios esenciales
Marqués comparte una guía de ejercicios clave que puedes realizar en casa:
Para la zona media del rostro (mejillas y boca):
- Abre la boca ampliamente formando una ‘O’ apretada con los labios, manteniendo la mandíbula en esa posición abierta. La piel alrededor de la boca y las mejillas debe estar lisa y tensa.
- Cubre suavemente los dientes con el labio superior, manteniendo los labios en una ‘O’ estrecha. Mantén la posición 10 segundos, relaja y repite 3 veces.
Para la mandíbula y la parte inferior del rostro:
- Abre la boca y enrolla los labios hacia dentro, cubriendo los dientes. Mantén la zona tensa.
- Abre la boca lentamente en 5 segundos y ciérrala lentamente (sin llegar a cerrarla del todo). Repite este movimiento 10 veces.
- Eleva ligeramente la barbilla y repite otras 10 veces. Relaja y vuelve a la posición inicial.
Para los párpados:
- Forma una ‘V’ con los dedos índice y medio de ambas manos. Coloca los dedos medios en las comisuras internas de los ojos y los índices en las comisuras externas.
- Entorna los ojos suavemente durante 2 segundos y relaja. Repite 10 veces.
- Asegúrate de que la frente permanezca relajada. Las cejas deben permanecer inmóviles, el trabajo lo hacen solo los párpados. Repite toda la secuencia 3 veces.
Según las expertas, el yoga facial se puede practicar a cualquier edad. En los 20 y 30 años, es una «herramienta fantástica» de prevención, mientras que en los 40, 50 y más, ayuda a recuperar el tono muscular, levantar zonas caídas, reducir arrugas y devolver una expresión más relajada y luminosa.
En solo 10 minutos al día, el yoga facial te reconectará con tu rostro, liberará tensiones emocionales y te dará herramientas para cuidar tu piel y tu aspecto con alegría y autonomía, sin importar la edad.