En un incidente que pone de manifiesto los peligros que enfrentan a diario los agentes de la ley, un funcionario de la Policía de Investigaciones (PDI) se vio obligado a utilizar su arma de fuego para detener a un delincuente armado que intentaba robar su vehículo en la comuna de Conchalí, Región Metropolitana.
El hecho ocurrió en la madrugada de este sábado en la autopista Vespucio Norte, a la altura del acceso a la autopista Los Libertadores. El policía se encontraba acompañado cuando fue interceptado por un automóvil con tres individuos en su interior. Dos de ellos descendieron y amenazaron a las víctimas con un arma de fuego, exigiendo el robo del vehículo.
Según el subprefecto Eugenio Ríos, jefe de ronda de la PDI, «Uno de ellos muestra un arma de fuego con la cual lo señalaba y le pegaba en la ventana, a lo cual el funcionario repele esta acción con su arma de fuego, realizando diversos disparos». Lamentablemente, el asaltante armado falleció en el lugar a causa de los impactos de bala.
Rápida Reacción Evitó Mayor Tragedia
Las autoridades confirmaron que no hubo un intercambio de disparos y que el funcionario actuó de manera oportuna, impidiendo que los delincuentes pudieran reaccionar. Los otros dos asaltantes lograron huir del lugar, sin que se haya podido determinar si alguno de ellos resultó herido.
Por instrucción del Ministerio Público, el Laboratorio de Criminalística (Labocar) de Carabineros quedó a cargo de las diligencias para esclarecer los detalles de este incidente.
Protección y Servicio en Tiempos Difíciles
Este lamentable hecho pone de manifiesto los riesgos que enfrentan a diario los agentes encargados de velar por la seguridad ciudadana. Si bien el uso de la fuerza letal es siempre la última opción, en ocasiones como esta se convierte en una medida necesaria para salvaguardar vidas inocentes.
La rápida y valiente reacción del funcionario de la PDI evitó que este intento de robo se convirtiera en una tragedia aún mayor. Su accionar demuestra el compromiso y la profesionalidad con la que los miembros de las fuerzas de seguridad cumplen su deber, incluso en situaciones de alto riesgo.