En un golpe contundente a la expansión del crimen organizado en la región, la justicia argentina ha procesado a 13 personas, 11 de ellas de nacionalidad venezolana, por su presunta vinculación con la organización criminal transnacional conocida como el Tren de Aragua.
Según informó la Fiscalía, el juez federal Gustavo del Corazón de Jesús Fresneda, de la ciudad de Corrientes, dictó el procesamiento con prisión preventiva de este grupo de individuos, acusados de delitos como asociación ilícita en una organización criminal, financiación de actividades terroristas y lavado de activos.
El principal imputado en esta investigación es el venezolano Guillermo Rafael Boscán Bracho, señalado como el líder de la denominada «Banda del Yiyi», vinculada al Tren de Aragua. Boscán Bracho, quien tenía una orden de captura internacional, fue detenido el 2 de octubre de 2023 en Argentina, luego de haber ingresado al país con una identidad falsa en junio de 2019.
Según el juez Fresneda, estas personas «conforman el entorno familiar» de Boscán Bracho y «pertenecen a una organización criminal transnacional estructurada, con una clara división de roles, capacidad operativa sostenida y un sistema económico subrepticio de disimulación y circulación de fondos, que funciona de forma estable en territorio argentino».
El Tren de Aragua: Una Amenaza Regional
El Tren de Aragua es una peligrosa organización criminal que surgió en la prisión de Tocorón, en el estado venezolano de Aragua, y que en la última década ha expandido sus operaciones a varios países de Sudamérica, incluyendo Chile.
En febrero de 2023, la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro de Estados Unidos la designó como «organización terrorista extranjera», lo que llevó al Ministerio de Seguridad Nacional de Argentina a incluirla en el Registro Público de Personas y Entidades vinculadas a actos de Terrorismo.
Implicaciones y Desafíos
Este desmantelamiento de una célula del Tren de Aragua en Argentina representa un importante golpe a la expansión de esta peligrosa organización criminal en la región. Sin embargo, los expertos advierten que el Tren de Aragua sigue representando una amenaza significativa, con ramificaciones que se extienden más allá de las fronteras nacionales.
La lucha contra el crimen organizado transnacional requiere de una coordinación y cooperación internacional sólida, así como de un abordaje integral que combine acciones judiciales, de inteligencia y de seguridad. Solo así se podrá contener el avance de grupos como el Tren de Aragua y proteger a las comunidades afectadas por su actividad delictiva.