El Gobierno de Chile se mantiene firme en su intención de llevar a cabo la Consulta Indígena por un Nuevo Sistema de Tierras, a pesar del rechazo expresado por las comunidades del Alto Bío Bío. Esta iniciativa, que comenzó en agosto en la Macrozona Sur del país, ha generado controversia en la provincia de Bío Bío, donde se han realizado consultas en las comunas de Los Ángeles y Alto Bío Bío.
Según Juan Recabarren, secretario técnico de la Consulta Indígena, el proceso se ha desarrollado con normalidad en la mayoría de las regiones. Sin embargo, en el Alto Bío Bío, las comunidades han manifestado su negativa a seguir adelante con la consulta.
Diálogo y Apertura al Consenso
Frente a esta situación, el Gobierno ha indicado que volverá a conversar con las comunidades del Alto Bío Bío para intentar avanzar con el proceso. Recabarren recalcó que el Gobierno está abierto al diálogo y espera poder concretar instancias que permitan subsanar este tema.
La Consulta Indígena consta de varias etapas y, según el secretario técnico, en la provincia de Bío Bío se ha desarrollado «de buena manera«, a diferencia de lo ocurrido en otras regiones del país. Sin embargo, en el Alto Bío Bío, las comunidades han sido firmes en su rechazo a continuar con la consulta.
Importancia de la Participación Indígena
La Consulta Indígena por un Nuevo Sistema de Tierras es un proceso clave para garantizar la participación y el diálogo con los pueblos originarios en la definición de políticas públicas que les afectan directamente. El Gobierno ha insistido en la normalidad del proceso, pero deberá enfrentar el desafío de lograr el consenso con las comunidades del Alto Bío Bío para avanzar de manera efectiva.
La resolución de este conflicto será fundamental para determinar el éxito de la Consulta Indígena y su capacidad de reflejar las necesidades y aspiraciones de los pueblos originarios en la región.