En una decisión sin precedentes, la Agencia de Prevención de Violencia en el Deporte (APreViDe) de Argentina ha anunciado una severa sanción contra los hinchas de Universidad de Chile (La U). Hasta el 31 de diciembre de 2027, se les prohibirá llevar público visitante a cualquier partido que disputen en toda la provincia de Buenos Aires.
Esta medida drástica se produce en el marco de los violentos incidentes que tuvieron lugar el pasado 20 de agosto de 2025, durante los octavos de final (vuelta) de la Copa Sudamericana en el estadio Libertadores de América. Según el informe de la APreViDe, los fanáticos chilenos iniciaron disturbios, incendiando butacas y causando daños en las instalaciones para obtener objetos contundentes.
Pero eso no fue todo. El organismo también condenó con derecho de admisión a 41 de los barristas de Independiente que agredieron violentamente a los hinchas chilenos, poniendo en riesgo su vida e integridad física. Estos hechos se enmarcan en la Ley 11929 de Argentina, que sanciona las faltas cometidas con motivo o en ocasión de un espectáculo deportivo.
Consecuencias Graves para La U
La prohibición de llevar público visitante a Buenos Aires es una medida sin precedentes en el fútbol argentino y tendrá un impacto significativo en los partidos de La U. Los fanáticos chilenos no podrán acompañar a su equipo en ningún encuentro que se dispute en la provincia hasta finales de 2027.
Esta sanción refleja la gravedad con la que las autoridades argentinas han respondido a los actos de violencia protagonizados por ambos grupos de hinchas. La seguridad y el orden público en los estadios son una prioridad absoluta, y este castigo ejemplar busca enviar un mensaje claro de tolerancia cero ante este tipo de incidentes.
Lecciones Pendientes sobre Violencia en el Fútbol
Estos hechos lamentables ponen de manifiesto la necesidad urgente de abordar el problema de la violencia en el fútbol a nivel regional. Tanto los clubes como las federaciones y las autoridades deben trabajar de manera coordinada para erradicar estos episodios que manchan la imagen del deporte.
Más allá de las sanciones, es fundamental implementar medidas preventivas y educativas que fomenten una cultura de respeto y convivencia pacífica entre los hinchas. Solo así podremos asegurar que los partidos de fútbol vuelvan a ser espacios de sana competencia y disfrute para todos los aficionados.