Después de casi dos años, el juicio por la trágica colisión entre un taxibús y un tren Biotren en San Pedro de la Paz, que cobró la vida de ocho pasajeros, llega a su punto culminante. Las juezas que dirigen el proceso se encuentran ahora en la etapa final de deliberación, enfocadas en determinar la conducta del conductor Alejo Santander al momento de cruzar la vía férrea a pesar de la proximidad del tren.
La Defensoría ha presentado pruebas para argumentar que se trató de un accidente, lo que conllevaría a cargos por cuasidelitos de homicidio. Por el contrario, el Ministerio Público sostiene que hubo dolo eventual por parte del conductor, es decir, que actuó a sabiendas del riesgo y, por lo tanto, debería ser condenado por homicidio.
Durante los alegatos finales, el fiscal Andrés Barahona fue enfático al afirmar que la investigación demostró que el conductor tenía la costumbre de ignorar las alertas en el cruce ferroviario, lo que evidenciaría su actuar doloso. Por su parte, el abogado César Irribarra, en representación de los querellantes, recordó a las juezas las pruebas presentadas para probar la comisión del delito de homicidio.
Además, el abogado Felipe Guerrero, de la Delegación Presidencial, subrayó que la conducta dolosa del conductor Alejo Santander, en su rol como chofer de transporte público, también es un factor clave a considerar.
El veredicto final podría ser entregado este martes, luego de los alegatos finales de la defensora penal Sandra Betancourt. De ser condenado por homicidio, Alejo Santander arriesga una pena de hasta 26 años de cárcel, además de las lesiones sufridas por otras 10 víctimas.