Una disputa por la propiedad de un terreno en la costa de Valdivia ha generado un conflicto entre una familia local y las autoridades. La familia Anwandter, que asegura ser dueña del espacio, criticó el procedimiento llevado a cabo por Carabineros para retirar los cercos que habían instalado, argumentando que el operativo «no se ajustó a lo legal».
El Proyecto de Conectividad y el Reclamo de Propiedad
El Ministerio de Obras Públicas inició un proyecto para mejorar el único acceso que tienen los vecinos de Pilolcura a sus casas. Para ejecutar estas obras, se requería utilizar el camino que habría sido cerrado por Gustavo Anwandter, quien alega ser el propietario del terreno. Ante esto, el particular presentó un recurso de protección que fue rechazado por la Corte de Apelaciones de Valdivia, ya que no había certeza sobre la propiedad de la faja del camino.
El Operativo Policial y las Críticas de la Familia
Carabineros, en coordinación con la Delegación Presidencial de Los Ríos, procedió a retirar los cercos instalados por la familia Anwandter. Sin embargo, el hijo de Gustavo, Pablo Anwandter, criticó el operativo, señalando que «no se ajustó a lo legal» y que existe un recurso administrativo aún no resuelto por la Subsecretaría del Interior. Además, indicó que no hubo oportunidad de diálogo y que un procedimiento a la fuerza no es la vía para resolver el conflicto.
La Posición del Ministerio de Obras Públicas
Desde el Ministerio de Obras Públicas explicaron que el proyecto consiste en el control del cauce y defensas, mediante la instalación de cajones de hormigón que permitirán la circulación ante las crecidas del estero, sin riesgo de destrucción de la estructura. Para ejecutar estos trabajos, se requería utilizar el camino que habría sido cerrado por Gustavo Anwandter, lo que llevó a solicitar el auxilio de la Fuerza Pública para retirar los cercos que obstruían el camino y retomar las obras de emergencia.
Un Conflicto que Persiste
Pese a la acción de las autoridades, Pablo Anwandter advirtió que delimitarán nuevamente el terreno, recalcando que están en su derecho al tratarse de un sitio que le pertenece a su padre. Este conflicto parece no tener una solución inmediata, y la familia Anwandter insiste en que la disputa se debe resolver a través del diálogo con el Ministerio de Obras Públicas.
