La economía cubana se enfrenta a una situación sin precedentes, con el dólar estadounidense alcanzando nuevos máximos históricos en el mercado cambiario informal. Según el índice elaborado por el medio independiente El Toque, la moneda nacional cubana, el Peso Cubano (CUP), se ha depreciado más del 1.567% con respecto al billete verde desde la reforma monetaria de 2021.
Este hito coincide con el proceso de dolarización parcial de la economía cubana, una medida adoptada por el Gobierno para hacer frente a la profunda crisis que azota al país desde hace más de cinco años. Ante la escasez de divisas, el Ejecutivo ha dolarizado gran parte de su red de establecimientos comerciales y ha comenzado a cobrar en dólares por algunos de los servicios estatales y de su amplia cartera de empresas.
Desequilibrios Económicos y Sociales
Si bien el Gobierno cubano ha descrito esta medida como una «pieza clave» de su programa de recuperación económica, los expertos advierten de las graves consecuencias que conlleva. Según el economista cubano Pavel Vidal, a diferencia de otras economías latinoamericanas con monedas depreciadas, en Cuba no se ha acompañado esta caída con un incremento salarial ajustado a la inflación, lo que ha provocado un «ensanchamiento» de las «brechas que marcan la desigualdad social».
Por su parte, el profesor Mauricio de Miranda, de la Universidad Javeriana de Cali (Colombia), señala que «en la medida en que el Gobierno cubano abra más tiendas en dólares y la población disponga de menos alternativas en pesos para asegurar sus necesidades, va a seguir subiendo el dólar». Esto genera fuertes desequilibrios económicos, ya que el tipo de cambio oficial se mantiene fijo en 24 CUP por dólar para personas jurídicas y en 120 CUP por billete verde para personas físicas.
Hacia una Nueva Tasa de Cambio
Ante esta situación, el Gobierno cubano ha anunciado que prevé establecer una nueva tasa de cambio del peso antes de finalizar el año. Según el primer ministro Manuel Marrero, se trataría de un tipo flotante que se modificaría diariamente. Sin embargo, expertos como Mauricio de Miranda advierten que esto podría generar «millones de distorsiones en la economía» y fomentar la «desigualdad» y la «corrupción», al sumar una nueva tasa a las tres actuales (las dos oficiales y la informal).
La dolarización parcial de la economía cubana y la depreciación sin precedentes del peso han puesto de manifiesto la profunda crisis que atraviesa el país. Mientras el Gobierno busca soluciones, los expertos coinciden en que estas medidas tendrán graves consecuencias sociales y económicas si no se acompañan de un ajuste salarial y de políticas que protejan a los sectores más vulnerables de la población.