En una sorprendente revelación, un hombre inocente estuvo a punto de cumplir una condena de 300 días de cárcel en el Complejo Penitenciario del Bío Bío, en Concepción, Chile. ¿La razón? Su propio hermano le había suplantado la identidad.
Según informes de Cooperativa, el hombre inocente había sido acusado de dos delitos que no cometió: receptación y clonación de patentes de vehículos, ambos en la región de Antofagasta. Por esta razón, fue requerido por el Juzgado de Garantía de Concepción para cumplir «su condena». Pero en realidad, era la condena de otra persona, un hecho que hasta ese momento se desconocía.
La Confesión que Evitó una Injusticia
Fue entonces cuando el hermano del hombre inocente apareció y confesó su participación en los delitos mencionados. Además, reconoció que había suplantado la identidad de su hermano con el objetivo de evitar la condena.
Osvaldo Pizarro, defensor regional de la Defensoría Penal Pública en el Bío Bío, destacó la importancia de este caso: «La falta de verificación de identidad en procedimientos policiales casi lleva a un inocente a cumplir más de 300 días de cárcel. Este error revela la urgencia de reforzar los protocolos de verificación de identidad, porque cada omisión puede destruir la vida de una persona inocente».
Un Triunfo de la Justicia
Finalmente, gracias a la oportuna intervención y confesión del hermano, se evitó que el joven inocente fuera ingresado a prisión para cumplir una condena por un delito cometido por otra persona. Como señaló Pizarro, «este caso demuestra que una oportuna defensa puede marcar la diferencia entre la libertad y la injusticia».
Este incidente resalta la importancia de contar con sólidos protocolos de verificación de identidad en los procedimientos policiales y judiciales. Solo así se podrá evitar que personas inocentes se vean injustamente encarceladas por los actos de otros.