Un devastador terremoto de magnitud 8.8 sacudió la remota península rusa de Kamchatka, en el Lejano Oriente, desatando una serie de olas gigantes que alcanzaron hasta 4 metros de altura y obligaron a evacuar a más de 2,700 personas, incluidos 600 niños, en las islas Kuriles.
Según informes de los servicios de emergencia rusos, las primeras olas de 3 a 4 metros de altura golpearon las costas del sureste de Kamchatka poco después del sismo, que se registró en la madrugada de este miércoles. Más de 30 réplicas de entre 2 y 5 de magnitud se produjeron en las horas siguientes, manteniendo la alerta en la región.
El Terremoto Más Potente en Décadas
El Servicio Geofísico Unificado de la Academia de Ciencias de Rusia calificó este evento como el mayor terremoto registrado en la península de Kamchatka desde 1952. «Éste ha sido el mayor terremoto en todo el período de observaciones. La magnitud ha sido 8.8. Se esperan réplicas periódicas», declaró Vladímir Sólodov, gobernador de Kamchatka.
Las cuatro olas gigantes provocadas por el sismo alcanzaron e inundaron la costa de la isla Paramushir, en el archipiélago de las Kuriles, llegando a avanzar hasta 200 metros tierra adentro y causando daños en la infraestructura portuaria de Sévero-Kurilsk.
Evacuaciones Masivas en Kamchatka y las Kuriles
Ante la alerta de tsunami, las autoridades locales tuvieron que evacuar un campamento de surfistas en Kamchatka, mientras que en las Kuriles se desalojó a unas 2,700 personas, entre ellas 600 niños. Esta rápida acción preventiva sin duda salvó vidas, dada la magnitud del fenómeno natural desatado.
Kamchatka es una de las regiones más sísmicamente activas del mundo, con una intensa actividad volcánica. Expertos advierten que este tipo de terremotos de gran magnitud y los tsunamis asociados representan un riesgo constante para las poblaciones costeras de la península y las islas adyacentes.
