Fernando do Santos Carvalho, conocido como ‘El Gordo’ en la Vila Valqueire de Brasil, es un hombre cuya historia se entrelaza con la del legendario futbolista Ronaldo Nazario, el ‘Fenómeno’. En la década de 1980, cuando Ronaldo era apenas un joven talento, fue Fernando quien lo descubrió y le dio la oportunidad de destacar en su escuela de fútbol sala.
El Descubrimiento del ‘Fenómeno’
Según recuerda Fernando, en 1984 Ronaldo se presentó a una prueba en su club, el Vila Valqueire Tênis Clube. En ese entonces, Ronaldo también jugaba en un equipo de fútbol 11, pero no había espacio para él, por lo que lo utilizaban como portero. Fernando, consciente del talento del joven, lo dejó jugar varios partidos amistosos con su club, y fue así como la información sobre este prometedor jugador llegó a oídos de Jairzinho, mítico goleador de la selección brasileña en el Mundial de 1970, quien arregló su llegada al Cruzeiro.
El Duro Presente del Descubridor
Lamentablemente, el presente de Fernando no es nada fácil. Actualmente vive en la calle, en la zona de Marechal Hermes, en las afueras de Río de Janeiro, con solo un colchón. Además, tiene una discapacidad que le impide caminar con facilidad y le dificulta trabajar. Cuando necesita moverse, lo hace solo con la ayuda de un andador.
Los Intentos Fallidos de Obtener Ayuda
La familia y el círculo más cercano de Fernando han iniciado una campaña en Internet con la esperanza de tocar el corazón de Ronaldo Nazario y que el ‘Fenómeno’ pueda ayudarlo. Sin embargo, aseguran que ya han sido rechazados por la leyenda del fútbol en un par de ocasiones. Una de ellas, cuando Fernando viajó a São Paulo para pedirle dinero para comprar un andador, pero Ronaldo lo rechazó. En otra oportunidad, intentaron contactar a Renatinho, un ejecutivo que dirige uno de los restaurantes de Ronaldo en España, pero tampoco obtuvieron respuesta.
Una Historia de Olvido y Desamparo
Pese a las negativas, ni Fernando ni su familia se rinden, y se ilusionan con un gesto de ayuda del ‘Fenómeno’, a quien ayudó en sus inicios. Esta historia refleja cómo, a veces, aquellos que contribuyen al éxito de los grandes deportistas terminan olvidados y desatendidos, a pesar de haber sido fundamentales en sus carreras.
