En la búsqueda de un empleo, la entrevista laboral es una etapa crucial donde los reclutadores evalúan las capacidades y experiencia de los postulantes. Sin embargo, existen preguntas que nada tienen que ver con las aptitudes requeridas para el cargo y que, por lo tanto, no deberían ser formuladas.
Desde la firma de asesoría en capital humano SOS Group, se han identificado 5 preguntas inapropiadas que los candidatos no deberían responder durante una entrevista de trabajo:
1. ¿Cuántos hijos tienes y de qué edad?, o ¿quieres tener hijos?
La vida familiar de un postulante no tiene relación con sus capacidades para desarrollar el trabajo. Es una decisión personal cómo organiza sus redes de apoyo para responder adecuadamente a un cargo.
2. ¿Qué edad tienes?
Si el candidato cuenta con la experiencia y las competencias necesarias, la edad «debería dar lo mismo», ya que las habilidades se pueden encontrar en distintos rangos etarios.
3. ¿Tomas algún medicamento?
Esta información es de carácter privado y solo debe ser compartida con el médico, no con el entrevistador laboral. Una enfermedad crónica bien controlada y tratada no afecta el desempeño laboral.
4. ¿En qué comuna vives?
Si el postulante tiene las aptitudes para el cargo, «debería ser irrelevante su situación socioeconómica» o el sector donde reside. La puntualidad no depende de la distancia entre el hogar y el lugar de trabajo, sino de la gestión del tiempo.
5. ¿Cuál es tu nacionalidad?
Preguntar sobre la nacionalidad del candidato podría denotar prejuicios. Inmigrantes con documentos en regla y residencia temporal pueden ser contratados, cumpliendo el máximo de 15% de trabajadores extranjeros por empleador, según el Código del Trabajo.
Ante este tipo de preguntas inapropiadas, los expertos recomiendan a los postulantes redirigir la conversación hacia aspectos laborales, como su experiencia y competencias. También pueden responder con respeto: «Disculpe, pero ¿qué tiene que ver esa pregunta con las capacidades que tengo para el cargo?».
En definitiva, una entrevista de trabajo debe centrarse en evaluar las aptitudes del candidato, sin traspasar los límites de su privacidad. Tanto reclutadores como postulantes deben trabajar en pro de buenas prácticas de selección que garanticen un proceso justo y transparente.