En una visita oficial a Corea del Norte, el canciller ruso Serguéi Lavrov fue recibido por el líder norcoreano Kim Jong-un y elogió el firme apoyo de Pionyang a Rusia en la guerra con Ucrania. Durante la reunión, Lavrov agradeció particularmente a los «heroicos» soldados norcoreanos que ayudaron al ejército ruso a expulsar a las tropas ucranianas de la región fronteriza de Kursk.
Según la agencia estatal rusa TASS, Lavrov afirmó que los norcoreanos han «reafirmado su apoyo sin reservas a todos los objetivos» de la operación militar rusa en Ucrania. Esta no es la primera vez que Rusia reconoce la participación directa de Corea del Norte en el conflicto, luego de que el año pasado el presidente Vladimir Putin firmara un acuerdo de defensa mutua con Kim Jong-un.
La visita de Lavrov se produce apenas mes y medio después de que el secretario del Consejo de Seguridad ruso, Serguéi Shoigú, también viajara a Pionyang. Estos intercambios reflejan el fortalecimiento de los lazos militares entre ambos países, que han intensificado su cooperación en los últimos años.
Desde el inicio de la guerra en Ucrania, Corea del Norte ha sido un firme aliado de Rusia, suministrando armas y tropas para respaldar la ofensiva de Moscú. Este apoyo ha sido clave para Rusia, especialmente en la región de Kursk, donde las fuerzas norcoreanas ayudaron a expulsar a las tropas ucranianas que habían logrado avanzar en agosto de 2024.