La UEFA ha confirmado las sanciones impuestas a varios jugadores del Real Madrid por «conducta indecente» durante los últimos partidos de la Champions League. Los hechos ocurrieron tras el partido de vuelta de octavos de final entre el Real Madrid y el Atlético de Madrid, disputado en el estadio Metropolitano.
Sanciones a Rüdiger, Mbappé y Ceballos
Según la UEFA, el organismo sancionó económicamente a los jugadores Antonio Rüdiger (con 40.000 euros) y Kylian Mbappé (con 30.000 euros) por violar las reglas básicas de conducta frente al Atlético de Madrid. Además, ambos jugadores recibieron un partido de sanción que solo cumplirán en caso de reincidencia.
Por su parte, el también jugador del Real Madrid Dani Ceballos fue multado con 20.000 euros por el mismo motivo. La UEFA, sin embargo, no adoptó medida disciplinaria alguna contra el brasileño Vinicius Júnior, quien también fue investigado.
Celebración Polémica y Objetos Lanzados
Los hechos sancionados se produjeron tras la tanda de penaltis, cuando Rüdiger, que marcó el último penal que dio la clasificación al Real Madrid, y algunos de sus compañeros (incluyendo a Ceballos, que no estaba convocado) se dirigieron al fondo norte del Metropolitano para celebrar el pase con los aficionados madridistas desplazados. Durante esta celebración, la UEFA apreció «gestos contrarios al buen orden deportivo» por parte de los jugadores del Real Madrid, mientras sorteaban los objetos lanzados por los seguidores del Atlético.
Sanción Adicional por Saludo Nazi
Además, la UEFA ratificó una multa de 15.000 euros al Real Madrid después de que un aficionado del conjunto blanco realizara un saludo nazi en la grada del Emirates Stadium durante el partido de cuartos de final de la Champions ante el Arsenal. Este hecho provocó que la UEFA advierta al Real Madrid de que le prohibirá la venta de entradas a sus aficionados visitantes durante un partido en caso de que exista reincidencia de un comportamiento racista.
En resumen, la UEFA ha tomado medidas disciplinarias contra varios jugadores del Real Madrid por su «conducta indecente» durante los últimos partidos de la Champions League, imponiendo sanciones económicas y de suspensión. Estos hechos ponen de manifiesto la importancia de mantener un comportamiento deportivo adecuado, incluso en momentos de alta tensión y celebración.