Un nuevo y enigmático objeto interestelar ha sido detectado acercándose a nuestro Sistema Solar, activando una red global de seguimiento astronómico. Este es el tercer objeto de este tipo que se registra, después de los famosos Oumuamua y el cometa 2I/Borisov.
El hallazgo fue reportado inicialmente por el estudiante de astrofísica K Ly, quien lo encontró en los registros del Deep Random Survey en Chile. Rápidamente, otros astrónomos confirmaron que el Sistema de Última Alerta de Impacto Terrestre de Asteroides (ATLAS) también había detectado el objeto a finales de junio.
Seguimiento Intensivo a Nivel Global
Ante esta sorprendente noticia, la Agencia Espacial Europea (ESA) informó que su equipo de defensa planetaria está rastreando activamente el objeto, provisoriamente denominado A11pl3Z, utilizando observatorios en diferentes partes del mundo.
Por su parte, la NASA ya ha agregado el objeto a su lista de Objetos Cercanos a la Tierra (NEO), pero ha descartado que pueda impactar nuestro planeta. Según el investigador Josep M. Trigo Rodríguez, del Instituto de Ciencias del Espacio (ICE-CSIC), A11pl3Z tiene un diámetro aproximado de 40 kilómetros y «parece proceder del disco galáctico, una zona de donde es previsible que puedan originarse este tipo de objetos».
¿Asteroide o Cometa?
Aún no se ha podido determinar con certeza si A11pl3Z es un asteroide o un cometa. Trigo explica que «a fecha de hoy, el objeto se encuentra todavía a 528 millones de kilómetros de la Tierra y a 678 millones de kilómetros del Sol, por lo que no es tarea fácil precisar su naturaleza a partir de las observaciones actuales».
Lo que sí es claro es que la comunidad astronómica está sumamente interesada en estudiar a fondo este fascinante visitante interestelar y desentrañar los misterios de su origen y composición. Sin duda, este hallazgo abrirá nuevas e emocionantes perspectivas en el campo de la exploración del espacio profundo.