Christiane Endler, la talentosa arquera chilena del Olympique de Lyon, ha revelado detalles desgarradores sobre su decisión de retirarse de la Selección Nacional a fines de 2023. Lejos de ser una elección fácil, la otrora capitana de La Roja se vio obligada a anteponer su salud mental a la pasión por defender los colores de su país.
Ataques de Pánico y Estrés Insostenible
Endler explicó que estaba atravesando un período «muy difícil y estresante» con la Selección, llegando incluso a sufrir ataques de pánico que la llevaron a desmayarse en un restaurante. «Eso fue el punto que rebalsó el vaso», afirmó la arquera, quien llevaba tiempo cuestionándose si podría seguir soportando esa situación.
La presión y el agotamiento emocional se habían vuelto insostenibles para Christiane. «Me costó muchísimo tomar esa decisión, pero me replanteé muchas veces si era la correcta o no», reconoció. Finalmente, priorizó su bienestar y se alejó de La Roja, un sacrificio que le permitió volver a ser ella misma y disfrutar del fútbol.
Una Estrella Seducida por la Élite
Lejos de la Selección, Endler ha sido cortejada por los mejores clubes del mundo. Su agente reveló que gigantes como el Real Madrid, el Barcelona y el Manchester United han intentado ficharla, demostrando el enorme talento y prestigio de la arquera chilena.
Sin embargo, Christiane ha aprendido que su salud mental es lo más importante. Después de casi dos años fuera de La Roja, afirma haber «vuelto a ser yo, a disfrutar, pasarlo bien y tener más tiempo para mí». Una lección valiosa que debería inspirar a otros atletas a priorizar su bienestar emocional.
Lecciones de Resiliencia y Autoconocimiento
La historia de Christiane Endler es un recordatorio de que incluso las estrellas más brillantes pueden verse abrumadas por la presión. Su valentía al anteponer su salud a la carrera deportiva es un ejemplo de resiliencia y autoconocimiento que debería resonar en todo el mundo del deporte.
Ahora, lejos de los focos, Endler ha recuperado la alegría de jugar. Su decisión demuestra que, a veces, el éxito verdadero radica en saber cuándo decir «basta» y priorizar el bienestar propio. Una lección que todos deberíamos aprender.