Una tragedia sacudió a la India este jueves cuando un avión Boeing 787 de la aerolínea Air India, con más de 240 personas a bordo, se estrelló minutos después de despegar del aeropuerto de Ahmedabad, en el oeste del país.
Según los informes, la aeronave, que operaba el vuelo AI-171 con destino al aeropuerto de Gatwick en Londres, emitió una llamada de «MAYDAY» poco después del despegue, pero no volvió a responder a las comunicaciones antes de precipitarse a tierra.
Esfuerzos de rescate y reacción de las autoridades
Inmediatamente después del accidente, el jefe de Gobierno de Gujarat, Bhupendra Patel, expresó su «profunda angustia» y ordenó que se diera «prioridad absoluta» al tratamiento de los heridos y la creación de un corredor verde para su traslado rápido a los hospitales.
El ministro del Interior de la India, Amit Shah, se puso en contacto con el dirigente estatal para asegurar el «pleno apoyo del Gobierno Central» y el despliegue de equipos de la Fuerza Nacional de Respuesta a Desastres (NDRF) para colaborar en las labores de rescate.
Investigación en curso
Por su parte, el ministro de Aviación Civil, Kinjarapu Rammohan Naidu, informó al primer ministro indio, Narendra Modi, sobre el accidente y se dirigió de urgencia a Ahmedabad para supervisar personalmente la situación.
La aerolínea Air India confirmó el incidente en un breve comunicado, señalando que estaban verificando los detalles y compartirían más información lo antes posible. Las operaciones de rescate y la investigación de las causas del siniestro continúan en curso.
