Una ola de ataques terroristas sacudió a la ciudad de Cali, Colombia, dejando un saldo de al menos dos personas muertas y 36 heridas. Según las autoridades, tres explosiones de bombas dirigidas contra puestos policiales se registraron en diferentes barrios de la capital del Valle del Cauca.
El secretario de Seguridad de Cali, Jairo García, informó inicialmente sobre una víctima fatal y nueve lesionados. Sin embargo, un balance posterior de la Secretaría de Salud reveló que en total se atendieron a 36 personas, entre ellas tres menores de edad, y se confirmaron dos fallecidos debido a la gravedad de sus heridas.
Las explosiones se produjeron en los barrios de Meléndez, Manuela Beltrán y Los Mangos. Una de las bombas estaba colocada en una motocicleta, mientras que las otras dos fueron detonadas en otros puntos de la ciudad.
Además de los ataques en Cali, en el vecino departamento del Cauca también se registraron otros incidentes violentos, como la detonación de dos carros bomba en los municipios de El Bordo y Corinto, y el asesinato de un policía por un francotirador en Caloto.
Las autoridades atribuyeron estos hechos a las disidencias de las FARC que lidera Néstor Gregorio Vera, alias ‘Iván Mordisco’, y que tienen una fuerte presencia en el suroeste del país. Nos quieren devolver a 1989. No lo permitiremos. ¡Viva Colombia!, manifestó el alcalde de Cali, Alejandro Eder, recordando el año en que el terrorismo de los carteles de las drogas causó un baño de sangre en Colombia.
Escalada de Violencia en el Suroccidente
Los ataques se producen en un momento de creciente tensión política en Colombia, a un día de la visita del presidente Gustavo Petro a Cali para participar en una movilización popular convocada por sindicatos en apoyo a su reforma laboral.
La gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro, manifestó que Los dueños del caos y del terror pretenden desestabilizar el Valle del Cauca, y solicitó al presidente Petro que convoque un Consejo de Seguridad para todo el suroccidente del país ante la escalada terrorista que se está viviendo.
Por su parte, el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, expresó su solidaridad con Cali, el Valle y el Pacífico, y afirmó que Hoy el país amaneció bajo amenaza. Varias explosiones, personas heridas y mucho miedo e incertidumbre. Es momento de una unión de todos los que creemos en la paz y la democracia para defender este país.
Llamado a la Unidad y la Seguridad
Ante este escenario de violencia, las autoridades han reiterado su compromiso con la defensa y seguridad de los ciudadanos. La Tercera División del Ejército, con jurisdicción en la zona, manifestó su respaldo absoluto a la Policía, que ha sido blanco directo de estos ataques.
En medio de la creciente tensión política y la escalada de violencia en el suroccidente de Colombia, el llamado es a la unidad de todos los sectores que creen en la paz y la democracia para hacer frente a estos actos terroristas y recuperar la seguridad de los colombianos.