En un hecho que ha generado gran preocupación en la comunidad de Osorno, la Fiscalía ha identificado a dos estudiantes como los responsables de emitir falsos avisos de bombas en establecimientos educacionales de la región. Estos actos, además de alterar gravemente la tranquilidad pública, han obligado a activar protocolos de emergencia y movilizar recursos de Carabineros y el GOPE.
Estudiantes Identificados y Acciones Legales
Según la fiscal jefe de Osorno, María Angélica de Miguel, las investigaciones realizadas han permitido determinar que un estudiante de enseñanza media y una alumna de la Universidad de Los Lagos fueron los autores de estos falsos avisos de bombas.
En el primer caso, ocurrido el 1 de abril en la Universidad de Los Lagos, se pudo determinar, mediante todas las técnicas investigativas, que efectivamente este aviso fue dado por una alumna de dicha casa de estudio, lo que llevó a la Fiscalía a solicitar la formalización de cargos ante el Juzgado de Garantía.
De igual manera, en el segundo incidente, registrado el 18 de abril en el Liceo Industrial de Osorno, también se pudo llegar, a través de estas mismas técnicas investigativas, a determinar que había sido hecho por un mismo alumno de ese establecimiento educacional.
Consecuencias Legales y Sociales
La fiscal De Miguel enfatizó que este tipo de llamados falsos sobre artefactos explosivos no solo alteran gravemente la alarma pública, sino que también constituyen un delito que será perseguido por la justicia. Además de las sanciones legales, estos actos tienen un impacto negativo en la comunidad, generando pánico y distrayendo recursos que podrían ser utilizados en otras emergencias.
Es importante destacar que la emisión de falsas alertas de bombas no solo pone en riesgo la seguridad de los estudiantes y el personal de los establecimientos, sino que también puede tener consecuencias a largo plazo. Estos incidentes pueden generar desconfianza en la comunidad, afectar la reputación de las instituciones y, en el peor de los casos, desviar la atención de verdaderas amenazas.
La Fiscalía de Osorno ha dejado en claro que no tolerará este tipo de conductas y que buscará las sanciones correspondientes para enviar un mensaje claro a la comunidad. Es fundamental que los estudiantes comprendan la gravedad de sus actos y las repercusiones que pueden tener, tanto a nivel legal como social.