Una controversia de tono geopolítico se ha desatado en Perú luego de que circulara en redes sociales un video que anunciaba la supuesta apertura de una avanzada planta militar rusa en territorio nacional. El material audiovisual, difundido tras el X Salón Internacional de Tecnología para la Defensa y Prevención de Desastres (SITDEF 2025), atribuye a Rusia la decisión de convertir al país sudamericano en un eje estratégico de mantenimiento de helicópteros en la región, generando así interpretaciones sobre una expansión de su influencia militar.
Helicentro Perú S.A.C., una de las empresas señaladas en el video, ha salido públicamente a desmentir cualquier participación. En un comunicado, la compañía que desde 2005 presta servicios de overhaul y reparación de helicópteros en el país, dejó en claro que no ha participado ni proporcionado ninguna información ni dato de la empresa que haya servido para la elaboración del material audiovisual publicitado y difundido en redes sociales
. Es decir, su nombre fue usado sin consentimiento en una campaña que plantea un escenario con implicancias geopolíticas.
El rol de Rusia y las implicaciones regionales
El video afirma que Perú será el nuevo eje militar aeronáutico para el mantenimiento y reparación de helicópteros de origen ruso, lo que significaría una consolidación de la presencia rusa en la región. Se menciona que este centro brindará servicios a países como Argentina, Chile, Brasil, Colombia, Bolivia, Ecuador y Venezuela, lo que podría interpretarse como una estrategia de Moscú para expandir su influencia en Sudamérica.
Sin embargo, Helicentro Perú S.A.C. aclaró que las instalaciones a las que se refiere el video fueron construidas hace varios años, en cumplimiento de un Programa de Compensaciones Sociales e Industriales (Offset), acordado en un contrato suscrito con la empresa estatal rusa Rosoboronexport. No se trata, entonces, de una construcción reciente ni de una inversión nueva promovida desde Moscú.
Tensión internacional de fondo
Aunque el video no lo explicita, el contexto internacional no puede ignorarse. Rusia continúa enfrascada en una guerra de desgaste en Ucrania, conflicto que inició el 24 de febrero de 2022. Las acciones militares han sido condenadas por varios países, incluyendo a miembros de la región como Colombia y Chile, debido a los ataques contra la población civil y las posibles violaciones del derecho internacional humanitario.
A raíz de este conflicto, Rusia ha sido objeto de sanciones económicas, aislamiento diplomático y restricciones en materia de exportación de tecnología militar por parte de varios países occidentales. En este escenario, su interés en expandir relaciones en América Latina podría tener también motivaciones políticas, buscando contrarrestar el poder de Estados Unidos en la región.
Implicancias y reacciones
El video plantea que Perú tendría ventajas sobre otros países por su ubicación y relaciones diplomáticas estables. Sin embargo, los voceros de Helicentro Perú S.A.C. insistieron en que no existió ninguna reunión con los representantes rusos durante el SITDEF 2025. Dicha aclaración busca distanciar a la firma de una narrativa que, al parecer, no fue consensuada.
En el comunicado, Helicentro también enfatizó que jamás autorizó a nadie a utilizar publicitariamente su razón social, historial empresarial ni alianzas estratégicas con otras empresas nacionales
. Esto evidencia una preocupación por el uso de su nombre en un contexto tan delicado.
¿Oportunidad o riesgo geopolítico?
El video intenta enmarcar el supuesto proyecto dentro de una lógica de independencia estratégica, beneficio económico y posicionamiento internacional de Perú. Sin embargo, esta narrativa genera recelo en algunos países, ya que podría ser interpretado como un desafío a la hegemonía estadounidense y una señal de reposicionamiento ruso en América Latina.
En este contexto, la decisión de Perú de profundizar sus vínculos con Rusia en el ámbito de la defensa y la tecnología militar se encuentra en una encrucijada. Por un lado, podría representar una oportunidad de diversificar sus relaciones internacionales y fortalecer su autonomía estratégica. Pero por otro, conllevaría importantes riesgos geopolíticos y tensiones con sus principales aliados occidentales.