La trágica muerte de Emilia Pinto, una niña de 3 años de la comuna de Calbuco, ha conmocionado a la comunidad y puesto en evidencia las graves fallas en el sistema de salud local. Según los hechos, la pequeña Emilia acudió en dos ocasiones al Hospital de Calbuco con síntomas de malestar, pero en ambas oportunidades fue enviada a casa con un diagnóstico erróneo de gastritis, cuando en realidad sufría de una hemorragia abdominal que finalmente le costó la vida.
Negligencia Médica y Falta de Recursos
De acuerdo a la información recabada, la niña presentó complicaciones de salud que la llevaron a urgencias del Hospital de Calbuco. Allí, fue atendida y enviada a su hogar con el diagnóstico de gastritis. Sin embargo, al empeorar, su madre la trasladó de urgencia al Hospital de Puerto Montt, pero Emilia falleció en el trayecto por una hemorragia abdominal que, según el alcalde de Calbuco, Marco Silva, habría sido tratada únicamente con ibuprofeno.
Ante esta situación, el alcalde Silva anunció que interpondrá una querella criminal contra todos los responsables, señalando que en ninguna de las dos consultas la niña habría sido atendida eficientemente. Además, se reveló que el hospital de Calbuco no cuenta con un pediatra fijo, lo que habría contribuido a este trágico desenlace.
Exigencias de la Comunidad y Compromiso de Autoridades
La muerte de Emilia Pinto ha generado una fuerte reacción en la comunidad. Los trabajadores del Hospital de Calbuco se manifestaron exigiendo la renuncia del director del establecimiento, Diego Alonso, acusando negligencia en el diagnóstico. Por su parte, el diputado Jaime Sáez se reunió con la directora del Servicio de Salud del Reloncaví, Bárbara Del Pino, quien se comprometió a asignar un pediatra para la comuna.
Esta tragedia ha puesto en evidencia la urgente necesidad de mejorar la calidad y la disponibilidad de los servicios de salud en Calbuco. Las autoridades deben actuar con celeridad para garantizar que hechos como este no vuelvan a ocurrir y brindar a la comunidad la atención médica que merece.
