Siete meses después de la trágica muerte del ex miembro de One Direction, Liam Payne, se ha revelado que el artista de 31 años dejó una impresionante fortuna de 24.3 millones de libras esterlinas. Debido a que Payne no dejó un testamento formal, la justicia británica ha determinado que su patrimonio neto será administrado de acuerdo a la ley de sucesión.
Esto significa que las dos personas más cercanas legalmente a Liam, su expareja y madre de su hijo Bear, Cheryl Tweedy, y su abogado Richard Mark Bray, serán los encargados de gestionar el dinero. Sin embargo, su autoridad sobre estos fondos está limitada, ya que se ha establecido que el dinero se ingresará a un fideicomiso para el único heredero de Payne: su hijo de 8 años.
«Es un pequeño consuelo saber que Bear nunca carecerá de nada», comentó un amigo cercano al cantante, quien habría expresado que Liam siempre se preocupó por la estabilidad financiera de su hijo. De esta manera, se estima que el pequeño Bear recibirá una herencia equivalente a aproximadamente 30.5 mil millones de pesos chilenos, asegurando su futuro y bienestar a largo plazo.
Esta noticia ha generado gran interés y especulación en torno a cómo se manejará esta cuantiosa fortuna para garantizar el mejor interés del hijo de Liam Payne. Expertos en finanzas y derecho de sucesiones han destacado la importancia de establecer un fideicomiso sólido que proteja el patrimonio y permita su crecimiento, de modo que Bear pueda disfrutar de una vida financieramente estable y segura.
La Preocupación de Liam por el Futuro de su Hijo
Según las fuentes cercanas al cantante, Liam Payne siempre estuvo muy comprometido con asegurar el bienestar financiero de su hijo Bear. Esto se refleja en el hecho de que, a pesar de no haber dejado un testamento formal, se haya establecido que su fortuna se destine a un fideicomiso en beneficio del niño.
Esta decisión demuestra la visión a largo plazo de Liam y su deseo de garantizar la estabilidad y las oportunidades que Bear merecía. Al no haber un testamento, la ley de sucesión británica ha sido la encargada de determinar este arreglo, lo cual ha sido visto como una forma de honrar las prioridades del cantante.
El Papel de Cheryl Tweedy y el Abogado en la Administración de la Herencia
Cheryl Tweedy, la expareja de Liam Payne y madre de su hijo Bear, junto con el abogado Richard Mark Bray, han sido designados como los encargados de administrar la cuantiosa fortuna dejada por el cantante. Sin embargo, su autoridad sobre estos fondos está limitada, ya que el objetivo principal es asegurar que el dinero se destine al fideicomiso en beneficio del único heredero: Bear.
Esta estructura de administración busca garantizar que la herencia de Liam se maneje de manera responsable y con el mejor interés del niño en mente. Tanto Cheryl como el abogado tendrán que rendir cuentas y tomar decisiones en conjunto, lo que asegurará una gestión transparente y orientada al bienestar a largo plazo de Bear.
Asegurando el Futuro Financiero del Hijo de Liam Payne
La decisión de establecer un fideicomiso para el hijo de Liam Payne ha sido ampliamente elogiada por expertos en finanzas y derecho de sucesiones. Este arreglo permite que la cuantiosa herencia del cantante se invierta y administre de manera prudente, garantizando que Bear tenga acceso a los recursos necesarios para su desarrollo y bienestar a lo largo de su vida.
Al ingresar la fortuna a un fideicomiso, se evita que el dinero se gaste o se maneje de manera irresponsable. En su lugar, los fondos se destinarán a cubrir las necesidades del niño, como educación, salud, vivienda y otras inversiones que aseguren su estabilidad financiera a futuro.
Esta estrategia de planificación patrimonial demuestra la preocupación de Liam Payne por el bienestar a largo plazo de su hijo, y su deseo de dejarle una herencia que le permita tener una vida financieramente segura y llena de oportunidades.