Luego de que un nutricionista de 40 años fuera víctima de un ataque armado mientras realizaba visitas de campo en la comuna de Ercilla, región de La Araucanía, el Centro de Salud Familiar (Cesfam) local ha iniciado un paro de tres días para exigir medidas efectivas que garanticen la seguridad de sus trabajadores.
El incidente ocurrió el pasado 3 de mayo, cuando el profesional de la salud y otros dos colegas fueron emboscados por un sujeto desconocido en un sector rural de Ercilla. Como resultado, el nutricionista sufrió un impacto de bala en una de sus piernas, siendo sometido a una cirugía de emergencia. Afortunadamente, el trabajador fue dado de alta este lunes, según confirmó el seremi de Salud de La Araucanía, Andrés Cuyul.
Reunión de Autoridades y Trabajadores de la Salud
En respuesta a este ataque, el Cesfam de Ercilla convocó a una asamblea que reunió a representantes de la salud, autoridades regionales y policiales. Durante el encuentro, que se extendió por varias horas, se abordó la falta de seguridad que enfrentan los trabajadores que visitan «zonas rojas» de la comuna.
El general Patricio Yánez, jefe de la Novena Zona de Carabineros, señaló que entre las primeras medidas a implementar está mejorar la coordinación entre los diferentes organismos. Además, se evaluó la posibilidad de sumar la presencia policial a los equipos de salud durante sus recorridos en terreno, aunque la autoridad indicó que es un aspecto que requiere un análisis más profundo.
Apoyo Psicológico y Petitorio de Demandas
Otra de las acciones inmediatas anunciadas por el delegado Presidencial en Malleco, Leopoldo Rosales, es que cada trabajador contará con apoyo psicológico tras el traumático incidente. Asimismo, se informó que el próximo miércoles se llevará a cabo un nuevo encuentro, donde se hará entrega de un petitorio que abordará cada una de las demandas planteadas por el personal de salud.
«Estamos comprometidos en brindar una respuesta integral que garantice la seguridad y el bienestar de nuestros trabajadores. Escucharemos atentamente sus necesidades y tomaremos las medidas necesarias para protegerlos en el desempeño de sus funciones»
, afirmó el delegado Rosales.
El paro de actividades del Cesfam de Ercilla es una clara muestra de la preocupación y el reclamo de los trabajadores de la salud por la falta de garantías de seguridad en las zonas más conflictivas de la región. Las autoridades se han comprometido a atender sus demandas y a implementar soluciones concretas que permitan que estos profesionales puedan desempeñar su labor de manera segura y sin temor a sufrir agresiones.
