El exmandatario brasileño, Jair Bolsonaro, se encuentra en una situación delicada luego de una reciente operación intestinal. Según informes médicos, Bolsonaro ha presentado un «empeoramiento clínico» con una «elevación de la presión arterial» y un «deterioro de los exámenes hepáticos». Esto ha obligado a los médicos a realizar nuevos estudios de imagen y mantenerlo en ayuno con nutrición parenteral exclusiva, además de fisioterapia y medidas preventivas.
Esta sexta cirugía en la misma región abdominal desde que Bolsonaro fue apuñalado en 2018 durante la campaña presidencial, parece haber complicado aún más su delicado estado de salud. Los médicos han expresado preocupación por la evolución de su cuadro, lo que podría retrasar aún más su recuperación.
Pero los problemas de Bolsonaro no se limitan a su salud. Mientras se encuentra en cuidados intensivos, también ha sido notificado oficialmente sobre el proceso judicial abierto en su contra por su presunta participación en los hechos del 8 de enero de 2023, cuando seguidores suyos asaltaron las sedes de los tres poderes en Brasilia.
«Bolsonaro se mostró profundamente irritado por eso y hasta publicó en sus redes sociales el momento en que la oficial de justicia le entregaba la notificación y una persona no identificada en el video le advertía que su presión arterial estaba subiendo.»
Antecedentes de la Operación y el Juicio
Bolsonaro fue sometido a una cirugía intestinal el pasado 13 de abril, que se prolongó por 12 horas. Esta intervención se suma a las seis operaciones que el exmandatario ha tenido en esa misma región desde que fue apuñalado en 2018 durante la campaña electoral.
Según se informó, Bolsonaro sufrió una «crisis intestinal» dos días antes de la última operación, en medio de una gira política en la que buscaba apoyo a un proyecto de amnistía para los seguidores condenados por el intento golpista del 8 de enero.
Proceso Judicial por los Hechos del 8 de Enero
Por estos hechos, el expresidente será juzgado en el Supremo Tribunal Federal como presunto mentor de la fallida asonada contra el Gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva. Bolsonaro fue notificado sobre este proceso judicial mientras se encontraba en la unidad de cuidados intensivos, lo que generó una reacción de irritación en él.
Según se informó, el trámite de notificación se había demorado debido al delicado estado de salud de Bolsonaro, pero finalmente se concretó después de que el exmandatario participara en una transmisión en vivo en sus redes sociales, donde se promocionaba una nueva marca de cascos de moto.
Esta situación legal se suma a los problemas de salud que enfrenta Bolsonaro, lo que sin duda complica aún más su panorama en los próximos meses.
