EEUU e Irán han iniciado una nueva ronda de negociaciones sobre el programa nuclear de Teherán, con la mediación de Omán. Estas conversaciones, las primeras de este tipo desde 2018, buscan alcanzar un acuerdo que limite las actividades nucleares de Irán a cambio del levantamiento de sanciones económicas.
El jefe de la diplomacia iraní, Abás Araqchi, llegó a Omán y se reunió con el ministro de Relaciones Exteriores, Badr bin Hamad Al Busaidi, para exponer las posiciones de Irán. Por su parte, el emisario estadounidense para Medio Oriente, Steve Witkoff, liderará las negociaciones del lado de Estados Unidos.
Objetivos de las Negociaciones
Ambas partes buscan llegar a un acuerdo justo y honorable que preserve la seguridad regional y respete la soberanía de Irán. Según Araqchi, la intención de Irán es «llegar a un acuerdo justo y honorable desde una posición de igualdad».
Por su parte, la Casa Blanca ha calificado estas reuniones como «conversaciones directas», mientras que Irán las ha descrito como negociaciones a través de Omán como mediador.
Antecedentes y Contexto
Estas negociaciones se dan en un contexto de tensión entre EEUU e Irán, luego de que el gobierno de Donald Trump retirara a Estados Unidos del acuerdo nuclear de 2015 entre Irán y las grandes potencias. Desde entonces, Irán se ha desentendido de sus compromisos y se ha acercado peligrosamente a los niveles de enriquecimiento de uranio necesarios para fabricar una bomba atómica.
La Casa Blanca ha advertido que una acción militar contra Irán es «absolutamente» posible si no se alcanza un acuerdo. Por su parte, Irán ha amenazado con expulsar a los inspectores del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) si se produce una escalada.
Desafíos y Oportunidades
Las negociaciones enfrentan importantes desafíos, como la desconfianza acumulada y las posiciones encontradas de ambas partes. Sin embargo, también representan una oportunidad única para establecer un nuevo pacto nuclear que preserve la seguridad regional y respete los intereses de Irán.
El éxito de estas conversaciones dependerá de la capacidad de EEUU e Irán para encontrar un equilibrio entre sus respectivas preocupaciones de seguridad y soberanía. Solo así podrán alcanzar un acuerdo justo y duradero que ponga fin a años de tensión y confrontación.
