Nelson Ruminot, jefe de Gabinete del Delegado Presidencial Regional de Valparaíso, Yanino Riquelme, ha sido criticado por su participación en una reunión con el Serviu en 2024, donde asesoró a una empresa de construcción llamada FOINYECTA RODRIGUEZ LTDA. Ruminot, militante del Partido Comunista, tiene una amplia trayectoria como asesor de servicios del Estado, como el Servicio de Mejor Niñez, y actualmente ocupa el cargo de jefe de gabinete.
La reunión, que figura en la Ley de Lobby, fue un encuentro presencial entre Nelson Ruminot y tres representantes de la empresa FOINYECTA RODRIGUEZ LTDA, y duró al menos una hora en el Edificio Centenario en julio de 2024. En el encuentro, se trataron temas como el diseño, implementación y evaluación de políticas, planes y programas, con un enfoque en la reconstrucción tras el megaincendio que afectó a la región.
La empresa presentó una propuesta para la «implementación de un plan integral de reconstrucción que incorpore la construcción de viviendas industrializadas como una solución viable y eficiente para abordar la crisis habitacional» ante el entonces director del Serviu, Rodrigo Uribe. Estas viviendas industrializadas han sido una de las opciones consideradas por el Estado para la reconstrucción.
Esta reunión ha sido muy criticada, ya que Nelson Ruminot ahora es un trabajador estatal que participa activamente en reuniones con el Serviu y damnificados relacionadas con el proceso de reconstrucción, a pesar de haber estado vinculado anteriormente a esta empresa privada. Esto ha generado dudas entre parlamentarios, como el diputado Tomás Lagomarsino, quien ha solicitado explicaciones al Serviu y a la Delegación Presidencial sobre el rol del funcionario.
La diputada de Renovación Nacional, Camila Flores, ha anunciado que oficiará a la Contraloría para determinar si existe alguna inhabilidad de parte de Nelson Ruminot para ocupar el cargo de jefe de gabinete de Riquelme. Por su parte, Ruminot ha descartado tener vínculos con FOINYECTA, a pesar de figurar como gestor de interés en la reunión, y ha afirmado que su «relación con el proceso de reconstrucción es de tipo política en relación al trabajo de contingencia política, propio del cargo».
Este caso ha generado preocupación sobre posibles conflictos de interés y la transparencia en el proceso de reconstrucción en Valparaíso, lo que ha llevado a las autoridades a solicitar explicaciones y a investigar más a fondo la situación.
