El Gobierno ha sufrido un revés significativo en el inicio de la discusión de su proyecto de reforma al sistema de nombramientos del Poder Judicial. En la comisión de Constitución de la Cámara de Diputados, se rechazó la idea matriz de la iniciativa, que buscaba establecer un nuevo sistema de designación de jueces a través de un Consejo de Nombramientos Judiciales.
La Oposición se Impone
El rechazo a la idea matriz fue liderado por diputadas de la oposición, como Lorena Fries, Javiera Morales y Pamela Jiles, quienes cuestionaron que el proyecto no garantizaba una mayor independencia del Poder Judicial ni mecanismos de transparencia. Según la diputada Morales, el actual sistema, como lo demostró el caso Hermosilla, no funciona, por lo que propusieron excluir la participación del Senado o al menos disminuir su quórum en el proceso de nombramientos.
Búsqueda de Alternativas
Para el diputado Miguel Ángel Calisto, presidente de la comisión, este revés genera un panorama complejo y obliga a buscar mecanismos para reponer la indicación rechazada. Reconoce que el Gobierno enfrenta una crisis en el Poder Judicial que requiere respuestas, pero que ahora deberá negociar con las distintas bancadas para viabilizar la reforma.
Separación de Funciones y Equilibrio
El ministro de Justicia, Jaime Gajardo, ha resaltado la importancia de la separación de funciones administrativas y jurisdiccionales en los Tribunales Superiores, así como la necesidad de que la propuesta se distancie de los extremos de la politización y el corporativismo. Esto implica encontrar un equilibrio que garantice la independencia y transparencia del Poder Judicial.
A pesar de este revés inicial, el Gobierno mantiene su compromiso de reformar el sistema de nombramientos judiciales para enfrentar la crisis que afecta a la justicia. Ahora deberá redoblar esfuerzos para reencauzar el proyecto y lograr el apoyo necesario en el Congreso.